Asalto al Capitolio de EEUU: abundan teorías de conspiración
El asalto al Capitolio de EEUU del 6 de enero del año pasado pudo ser visto en vivo por televisión
Los estadounidenses vieron el ataque del 6 de enero al Capitolio en vivo por televisión. Muchos policías dieron testimonio sobre la violencia y el caos. Los procesos penales en las cortes han detallado lo sucedido, pero persisten las teorías de la conspiración y los intentos por rescribir la historia, enturbiando la comprensión pública de lo que en realidad sucedió durante el ataque más sostenido a la base de la democracia estadounidense desde la guerra de 1812.
Las falsedades sobre la revuelta —al excusar al expresidente Donald Trump de responsabilidad, minimizar la violencia de la turba y caracterizar a los atacantes como mártires— buscan desviar la culpa por el alzamiento del 6 de enero y sostener las afirmaciones infundadas de Trump sobre el presunto fraude de la elección de 2020.
Diseminadas por políticos, comentaristas de televisión por cable y amplificadas en redes sociales, las falsedades son un crudo recordatorio de cómo muchos estadounidenses no confían en sus propias instituciones, o ni siquiera sus propios ojos.
A continuación, un examen de algunas de las principales falsedades sobre el asalto al Capitolio y las personas que las han diseminado:
AFIRMACIÓN: LOS ASALTANTES NO ERAN PARTIDARIOS DE TRUMP
Lo cierto es que muchos de quienes irrumpieron en el Capitolio el 6 de enero han dicho —orgullosa, pública y reiteradamente— que lo hicieron para ayudar a Trump.
Diferentes versiones dicen que fueron agentes encubiertos del FBI o miembros del movimiento antifascista antifa.
“Hoy, el Capitolio fue sitiado por personas que solamente pueden ser descritas como contrarias al movimiento MAGA”, dijo la presentadora Laura Ingraham en su programa en Fox News la noche del 6 de enero, en alusión a las siglas abreviadas de Let’s Make America Great Again, un eslogan de la campaña de Donald Trump que significa “Hagamos grande a Estados Unidos otra vez”.
“Muy probablemente no todos eran partidarios de Trump y hay algunos reportes de que simpatizantes de antifa pudieran haber estado en la muchedumbre”, agregó, sin proveer fundamentos.
Un colega de Ingraham en Fox News, Tucker Carlson, ha promovido la idea de que el disturbio fue orquestado por el FBI. Menciona como evidencia las imputaciones de algunos acusados del 6 de enero que mencionan a coconspiradores no imputados, un término legal común que se refiere a quienes no han sido acusados formalmente y no a la supuesta evidencia de agentes encubiertos o informantes.
Pero Carlson afirmó en su programa que “potencialmente en cada caso, fueron agentes del FBI”.
Congresistas, incluso el representante republicano Matt Gaetz, han contribuido a diseminar las falsedades.
“Algunas de las personas que ingresaron en el Capitolio hoy no eran partidarios de Trump. Estaban haciéndose pasar por partidarios de Trump y, en realidad, eran miembros del grupo terrorista violento antifa”, aseguró Gaetz.
Pero lo cierto es que los revoltosos son quienes dijeron que eran.
En testimonio ante el Congreso, se le preguntó al director del FBI Christopher Wray si había razones para creer que la revuelta había sido organizada por “falsos partidarios de Trump”.
“No hemos visto evidencia de eso”, dijo Wray, que fue nombrado para el puesto por el propio Trump.