EEUU y Argentina expresan preocupación por iraní en Managua
Estados Unidos y Argentina expresan su preocupación por la reciente visita a Nicaragua del vicepresidente de Asuntos Económicos de Irán, Mohsen Rezai, sobre el cual pesa una alerta roja de Interpol por su presunta responsabilidad en el atentado contra un centro judío en 1994 en Buenos Aires
El secretario de Estado estadounidense Antony Blinken y el canciller argentino Santiago Cafiero expresaron el martes su “seria preocupación" por la reciente visita a Nicaragua del iraní Mohsen Rezai, sobre el cual pesa una orden de detención internacional por su presunta responsabilidad en el atentado contra un centro judío en 1994 en Buenos Aires
Ambos funcionarios se refirieron de esa forma a la presencia de Rezai -vicepresidente de Asuntos Económicos de Irán- el pasado 11 de enero en el acto de asunción el del presidente nicaragüense Daniel Ortega durante el encuentro que mantuvieron en Washington, indicó el portavoz del Departamento de Estado estadounidense, Ned Price en un comunicado.
El comunicado agrega que el funcionario iraní es “objeto de una Notificación Roja de Interpol por homicidio agravado y daños en relación con el atentado con bomba”. En la misma cita, Blinken y Cafiero analizaron formas de cooperación “para llevar ante la justicia” a los sospechosos del ataque a la Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA), que causó 85 muertes.
Sobre Rezai pesa una alerta roja de Interpol ya que está acusado por la justicia argentina de ser uno de los autores intelectuales del ataque. En aquel entonces, Rezai se desempeñaba como comandante de la Guardia Revolucionaria de Irán.
La cancillería argentina condenó recientemente la presencia del funcionario iraní en ese acto en Managua y señaló que había enviado “una nota no verbal de queja” a la Embajada de Nicaragua en Buenos Aires. Afirmó además que los hechos que se le imputan al funcionario iraní constituyen un crimen de lesa humanidad, por lo que su presencia en Managua, aún “en su carácter de vicepresidente de Asuntos Económicos de Irán, no lo exime de responder ante la justicia argentina".
La cancillería recordó asimismo los “lazos de amistad” que unen a Argentina con Nicaragua y al referirse a “las obligaciones que surgen del derecho internacional”. Dijo que espera contar “con la plena colaboración de la comunidad internacional para asegurar la comparecencia de los imputados y el esclarecimiento del ataque”, por el cual no hay ningún detenido.
La comunidad judía en Argentina y la Organización de Estados Americanos también manifestaron su rechazo por la presencia de Rezai.
En ese mismo acto en que Ortega asumió el poder, estuvo presente el embajador argentino en Managua, Daniel Capitanich, lo que generó las críticas de diputados de la oposición, que anticiparon que presentarán un pedido de interpelación al canciller Cafiero para que dé explicaciones “ante la presencia cómplice” de un funcionario de Argentina en el acto en el que se encontraba presente un acusado del atentado.
Diego Guelar, exembajador argentino en Estados Unidos, afirmó que Capitanich “debería haber pedido la detención (de Rezai) a la Interpol”.
Ortega tomó posesión para un nuevo mandato de cinco años, el cuarto de forma consecutiva, en medio de cuestionamientos de distintos países que consideran que su gobierno socava la democracia. No trascendieron imágenes del embajador argentino interactuando con el funcionario iraní durante la ceremonia de investidura del dirigente nicaragüense.
Irán niega su participación en el ataque, por el cual la justicia argentina imputó a ocho exdiplomáticos y exfuncionarios iraníes y a un integrante del grupo libanés y pro-iraní Hezbollah. Sobre cinco de ellos pesan alertas rojas de Interpol.