Ex Miss de Venezuela apoya sacar a venezolanos de Texas
Fue Miss Venezuela en la década de 1980 y ahora, desde Texas, es testigo de los cientos de venezolanos que entran a Estados Unidos cruzando la frontera desde México
Fue Miss Venezuela en la década de 1980 y ahora, desde Texas, es testigo de los cientos de venezolanos que entran a Estados Unidos cruzando la frontera desde México.
Carmen María Montiel, una venezolana miembro del partido republicano que se postula para representar al distrito 18 de Texas en el Congreso estadounidense, ha visto cómo el gobierno de ese estado envía a los migrantes venezolanos recién llegados en autobuses hasta Nueva York o Washington. Y apoya la medida, ya que, asegura, no es justo que sólo Texas y los estados fronterizos del sur absorban a todos los migrantes.
“Tenemos que dispersar todo esto o que se cierren las fronteras, esa es la realidad", dijo Montiel durante una entrevista telefónica con The Associated Press.
El estado de Texas, bajo las órdenes del gobernador republicano Greg Abbott, ha transportado en autobús a unos 8.000 inmigrantes a Washington desde abril. Muchos de ellos son venezolanos y se trasladan luego a Nueva York. Texas también ha transportado alrededor de 2.200 personas a Nueva York y 300 a Chicago.
Arizona, otro estado republicano, ha seguido los pasos de Texas y ha transportado en autobús a más de 1.800 inmigrantes a Washington desde mayo. El gobernador republicano de la Florida, Ron DeSantis, se sumó a estas operaciones de traslado recientemente enviando a más de 40 recién llegados venezolanos desde a Texas a la isla de Martha's Vineyard, en Massachusetts.
Los decenas de autobuses y vuelos han provocado una batalla política entre republicanos —usualmente favorables a limitar la migración— y demócratas, abiertos a ofrecer un camino a la legalización de migrantes.
Los alcaldes demócratas de Nueva York y Washington han dicho que necesitan ayuda federal para lidiar con la ola de migrantes que están recibiendo y que han colapsado refugios y agencias de ayuda públicas.
Montiel, nacida en Maracaibo, se coronó Miss Venezuela en 1984 y representó a Venezuela en el certamen Miss Universo de ese mismo año celebrado en Miami, Florida, donde obtuvo el título de segunda finalista. Su familia se trasladó a Estados Unidos hace 34 años. Montiel trabajó como periodista de televisión y tiene la ciudadanía estadounidense.
Tras ganar las primarias del partido republicano en marzo de este año, Montiel aspira a derrotar a la demócrata Sheila Jackson Lee en las elecciones de medio término del 8 de noviembre.
Montiel dijo que la situación de Venezuela y la falta de oportunidad allí “es grave”, sin embargo está en contra de llegar a Estados Unidos de forma irregular. También dijo que los migrantes no autorizados tampoco tienen grandes oportunidades en Estados Unidos debido a su estatus migratorio.
“Tenemos que hacer un llamado al gobierno federal para que por favor se cierre la frontera”, afirmó Montiel, que aspira llegar a la cámara baja federal. “Esto es una crisis humanitaria porque lo que pasa esta gente realmente para llegar acá es inhumano. Mueren en el camino, pasan por la selva del Darién. Las mujeres y los niños son violados. Esto hay que detenerlo. Yo no entiendo como nadie puede estar de acuerdo con que esto esté pasando”.
Tanto republicanos como demócratas aseguran que han hecho una inversión “millonaria”, superior a otras veces, para atraer al voto hispano en las elecciones de mitad de término. Estas determinarán si los demócratas retienen o pierden su frágil control de la Cámara Baja y el Senado.
La inversión ha sido grande en Texas, donde la mexicana Mayra Flores desbancó hace un par de meses a un demócrata en la lucha por representar al distrito 34, en el sur de Texas, en la cámara baja federal.
Aunque la demócrata Jackson Lee tiene posibilidades de ganar, Montiel dijo que el distrito 18 es mayoritariamente hispano y que los hispanos tienen valores conservadores.
“Los latinos vinieron debido al sueño americano, y ahora con la situación económica, por la política de Biden, pues está afectando sus bolsillos”, señaló Montiel. “Esto ha forzado al latino a despertar y a decir ‘¿sabes qué?’ Esto no nos conviene”.