GB sopesa más medidas para contener arribo de migrantes
El gobierno británico planea otorgarse poderes para rechazar a los solicitantes de asilo que arriban por mar o enviarlos al extranjero mientras se procesan sus pedidos de protección, una medida con el fin de disuadir a los migrantes de emprender la peligrosa travesía a través del Canal de la Mancha en pequeñas embarcaciones
El gobierno británico planea otorgarse poderes para rechazar a los solicitantes de asilo que arriban por mar o enviarlos al extranjero mientras se procesan sus pedidos de protección, una medida con el fin de disuadir a los migrantes de emprender la peligrosa travesía a través del Canal de la Mancha en pequeñas embarcaciones.
Un proyecto de ley presentado al Parlamento el martes allanaría el camino para mantener a los migrantes fuera de territorio británico, una idea altamente polémica según el modelo australiano de instalar centros de detención en las islas.
La Ley de Nacionalidad y Fronteras, de ser aprobada, permitiría a Gran Bretaña enviar a los solicitantes de asilo a un “tercer país seguro” mientras se estudian sus reclamos. Sin embargo, ningún país ha aceptado recibir a los migrantes que van al Reino Unido.
El proyecto penalizaría el arribo “consciente” a Gran Bretaña sin permiso con hasta cuatro años de prisión y daría a las personas que arriban por rutas aprobadas una ventaja en la revisión de sus solicitudes.
La secretaria del Interior, Priti Patel dijo que la ley “justa pero firme” ayudaría a reparar un sistema ineficaz. El gobierno conservador busca la manera de contener el arribo de personas —6.000 en lo que va del año— en botes, a menudo con ayuda de traficantes.
“Durante demasiado tiempo nuestro sistema de asilo quebrado ha llenado los bolsillos de pandillas de criminales viles que le hacen trampas al sistema”, dijo Patel. “Eso no es justo con la gente vulnerable que necesita protección ni con los británicos que lo pagan. Es hora de actuar”.
Los activistas que promueven los derechos de los refugiados dicen que el proyecto busca sancionar a personas que huyen de la violencia y la persecución.
Tim Naor Hilton, jefe de Refugee Action, dijo que el proyecto “se basa en una profunda incomprensión de la realidad de la migración de refugiados”.
“No podemos dividir a los refugiados en buenos y malos de acuerdo a su forma de arribar y andar buscando lugares a donde deportar a los que no queremos que entren”, dijo.