Ian amenaza al inestable mercado de seguros en Florida
El mercado de seguros inmobiliarios en Florida ya estaba en peligro
El mercado de seguros inmobiliarios en Florida ya estaba en peligro. Y ahora llega el huracán Ian.
La enorme tormenta que azotó el suroeste del estado con vientos catastróficos, lluvias e inundaciones probablemente dañará aún más al mercado local de seguros, afectado por miles de millones de dólares en pérdidas, insolvencias y primas elevadísimas.
La magnitud de la devastación generada por la tormenta estará más clara en los próximos días, pero preocupa que pudiera exacerbar los problemas existentes y sobrecargar un programa estatal de seguros que ya ha visto un fuerte aumento en el precio de las pólizas en medio de las dificultades de los propietarios de viviendas para encontrar cobertura en el mercado privado.
“El mercado de seguros inmobiliarios de Florida era el más volátil de Estados Unidos antes de que se formara el huracán Ian y lo más probable es que se vuelva aún más inestable tras la tormenta”, dijo Mark Friedlander, director de comunicaciones en el Instituto de Información de Seguros.
El sector de los seguros privados ha perdido más de 1.000 millones de dólares en cada uno de los últimos dos años y cientos de miles de habitantes de Florida han visto cómo les cancelaban sus pólizas o no se las han renovado. Las primas anuales promedio han subido a más de 4.200 dólares en el estado, el triple del promedio nacional.
Más de una docena de compañías han dejado de extender nuevas pólizas en el estado, y varias cerraron sus puertas este año. Una empresa fue declarada insolvente y colocada bajo administración judicial esta semana cuando Ian se dirigía hacia Florida.
Los propietarios de viviendas que no han logrado conseguir cobertura o los planes les son incosteables han recurrido de último momento a la aseguradora pública estatal, Citizens Property Insurance, que este verano rebasó el millón de pólizas por primera vez en casi una década. La legislatura estatal creó Citizens Property Insurance en 2002 para los habitantes de Florida que no logran obtener cobertura de aseguradoras privadas.
Las autoridades reguladoras y las aseguradoras locales han dicho desde hace tiempo que las demandas presentadas por propietarios de viviendas son una de las principales causas de la crisis en el estado. Dicen que la ley estatal hace que para los abogados sea muy lucrativo demandar a las aseguradoras, incluso si la cantidad ganada es relativamente pequeña. En la última mitad de la década de 2010, Florida representó aproximadamente el 8% de todas las reclamaciones de propietarios de viviendas en Estados Unidos, pero casi el 80% de todas las demandas de propietarios contra aseguradoras en el país, según una carta de la Oficina de Regulación de Seguros del estado.
En mayo, cuando se acercaba la temporada de huracanes, la legislatura estatal convocó a una sesión especial para abordar la crisis de los seguros. En tres días, y con poca participación del público y análisis de expertos, los congresistas aprobaron un amplio proyecto de ley con apoyo bipartidista que muchos en la legislatura consideraron un primer paso importante para la restauración del mercado.
Las disposiciones incluían la creación de un programa de reaseguros por 2.000 millones de dólares que las aseguradoras podían comprar para protegerse del riesgo, a condición de que les redujeran las tarifas a los asegurados. La ley ofrece subvenciones de hasta 10.000 dólares para reacondicionar viviendas a fin de hacerlas menos vulnerables a los daños causados por huracanes. También pretende limitar diversas cuotas de los abogados en las demandas relacionadas con seguros.
Aún así, la principal agencia calificadora de Florida, Demotech, amenazó este verano con rebajar la clasificación a unas dos docenas de compañías. Pero las preocupaciones sobre su solvencia disminuyeron un poco después de que la administración del gobernador Ron DeSantis aceptó permitir que el estado respalde a las aseguradoras.
En conferencias de prensa previas a la tormenta, DeSantis destacó que las reclamaciones por inundaciones podrían ser un fuerte problema tras el paso de Ian.
Las pólizas de seguros de viviendas —incluidas las de Citizens— no incluyen cobertura por inundaciones, la cual es manejada bajo un programa federal y es un asunto aparte del mercado de seguros. Por lo general es obligatorio contar con seguro contra inundaciones respaldado por el gobierno federal para las casas hipotecadas que se encuentran en zonas propensas a crecidas, pero en ocasiones las personas que son dueñas en su totalidad de sus viviendas declinan contratarlo y es menos común en zonas que no suelen ser propensas a inundaciones.
“Estamos viendo muchas reclamaciones por inundaciones”, dijo el gobernador cuando le preguntaron sobre la posibilidad de que las reclamaciones rebasen la capacidad de Citizens Property Insurance. “No estoy diciendo que no vaya a haber muchos daños por el viento, o sea, estamos ante un huracán, y probablemente ustedes verán eso".
“Hay más que quiero hacer en cuanto a los seguros contra daños por viento y eso será algo que atenderemos. A fin de cuentas debemos garantizar que las personas reciban atención, y es lo que haremos, sin importar lo que tengamos que hacer”.
Más de 2,5 millones de personas en Florida recibieron la orden de desalojar sus viviendas antes de que Ian tocara tierra el miércoles en la tarde. Algunos residentes se fueron de sus casas con la esperanza de encontrar daños mínimos a su retorno.
“No veo la ventaja de estar sentado aquí en la oscuridad, en una casa calurosa, viendo el agua ingresar a tu casa", dijo Tom Hawver, empleado de mantenimiento en Fort Myers, que evacuó su vivienda el miércoles. “Y no puedo hacer nada respecto al viento y el agua, así que regresaré en un par de días y haré una evaluación”.