Maite Perroni protagoniza y produce “La octava cláusula”
Maite Perroni protagoniza y produce “La octava cláusula”, un thriller psicológico sobre una pareja en proceso de divorcio cuyo marido condiciona a la mujer a tener relaciones con su amante en su presencia para llegar a un acuerdo económico en su separación
Maite Perroni protagoniza y produce “La octava cláusula”, un thriller psicológico sobre una pareja en proceso de divorcio cuyo marido condiciona a la mujer a tener relaciones con su amante en su presencia para llegar a un acuerdo económico en su separación. ¿Podrá más el dinero o la dignidad?
“Es ver hasta dónde somos capaces de llegar muchas veces por salvar nuestra piel”, dijo Perroni en una entrevista reciente por videollamada desde la Ciudad de México. “Es un momento en el que es: rescátese quien pueda y como pueda”.
En juego hay mucho dinero, pero lo que parece enredar más a Cat (Perroni) y su marido Borja (Óscar Jaenada) es más bien su necesidad de demostrar quién tiene el poder. Además, el amante (Manuel Vega) no es un desconocido; es uno de los mejores amigos de Borja.
“Este estado de alerta la hace tener que resolver, que pensar, que actuar y ver de qué manera va a salir de esta situación triunfante”, dijo Perroni sobre su personaje. “Nadie es como realmente parece que es”.
Las cosas se complican más cuando una mujer (Paulina Dávila) llega a la quinta remota donde se encuentran, a la orilla de un lago de México, pidiendo ayuda para su auto averiado. El filme, actualmente disponible en Amazon Prime Video, también cuenta con las actuaciones de Michel Duval y Jesica Coch.
Tras papeles en series como “El juego de las llaves” y “Oscuro deseo”, Perroni está acostumbrado al público a interpretaciones más poderosas, encarnando a mujeres maduras y sin miedo a ejercer su sexualidad, como Cat.
Por su parte, Jaenada, actor de filmes como “Cantinflas” y “Lovin Pablo” (“Escobar, la traición”) y series como “Luis Miguel” y “Hernán”, vuelve a demostrar que lo suyo son los personajes con personalidades complicadas, calculadores y sádicos, algo muy diferente a su verdadera esencia, a decir de Perroni.
“Para mí trabajar con Óscar fue un regalo gigante, yo lo he admirado mucho desde hace muchos años”, dijo. Óscar “es bondad, esa parte que tiene tan interesante en escena con otros perfiles y otros personajes es lo que se vuelve súper interesante y enriquecedor, porque él es un encanto, es muy adorable y a la hora de entrar en acción descubres todos esos matices que el personaje tiene que comunicar”.
La película fue filmada en México en 2020 en plena pandemia. Surgió como un reto para encontrar una historia que se pudiera contar sin requerir de muchas locaciones y que al mismo tiempo les permitiera reactivar la industria cinematográfica.
“Fue así", dijo Perroni. "Empezó la cabeza a girar y salió todo este mundo oscuro”.
“La octava cláusula” fue dirigida por el músico y artista chileno Koko Stambuk, con quien Perroni tenía una relación sentimental. Tras su experiencia en producción y actuación, además de ver de cerca el proceso de los realizadores, Perroni dijo que eventualmente le gustaría sentarse en la silla del director.
“En un futuro me gustaría estar en un set dirigiendo”, señaló. “Quiero hacer todo, pero creo que también hay que encontrar el tiempo y el momento, hay que ir paso a paso. Así como la actuación ha ido implicando retos y distintas decisiones, también creo que esta nueva etapa en donde empiezo a involucrarme desde la producción me está enseñando mucho”.
Al momento de la entrevista, la actriz se encontraba en plena filmación de una serie en la Ciudad de México durante llamados nocturnos.
“Ando con los horarios volteados, con todos los tiempos al revés, pero ha sido una experiencia padre (genial)”, dijo sin revelar otros detalles sobre la producción. “Estamos grabando hace cuatro meses ya, es un reto muy interesante, súper grande”.