María Hanneman, una joven apasionada del piano clásico
A sus 16 años, la pianista mexicana María Hanneman se ha presentado en el Carnegie Hall de Nueva York, en el Mozarteum de Salzburgo y en el Palacio de Bellas Artes de la Ciudad de México, ahora está por debutar en el Festival Internacional Cervantino en su edición 50
A sus 16 años, la pianista mexicana María Hanneman se ha presentado en el Carnegie Hall de Nueva York, el Mozarteum de Salzburgo y el Palacio de Bellas Artes de la Ciudad de México. Ahora, está por debutar en la 50ma edición del Festival Internacional Cervantino.
Llegar a estos famosos escenarios es un impulso para terminar la carrera de piano que estudia en el Conservatorio Nacional de México, donde cursa el sexto año de nueve. Hanneman sabe tocar un poco de violín y estudia también canto, aunque más por gusto; el piano ha sido su pasión desde que estaba en el jardín de infantes.
Empezó con un piano de juguete de color rojo a los 3 años, tocaba las canciones infantiles.
“Me encantaba, pero no sabía muy bien lo que estaba haciendo, nada más estaba tocando con un dedo”, recordó en una entrevista reciente con The Associated Press en Naucalpan, México.
Ella misma pidió a sus padres que la inscribieran en clases cuando tenía 4 años. Más adelante estudió con el método Suzuki, con el que dice que fue muy fácil aprender más del instrumento.
En su familia no hay otros músicos profesionales. Su abuelo paterno era holandés, su abuela paterna y abuelos maternos son mexicanos. A sus padres, que son publicistas, les gustaba más el rock, el pop y la música electrónica, pero comenzaron a introducirse más a la música clásica gracias a Hanneman.
“Mi papá escucha punchis, punchis, punchis y para él eso es música”, dijo risueña, imitando la música electrónica.
Hanneman terminó la secundaria en línea debido a la pandemia, y para la preparatoria prefirió presentar un examen de grado tras prepararse por seis meses en vez de asistir a la escuela.
“La verdad sentía que la escuela me quitaba tiempo en el piano”, dijo.
Ahora viaja por el mundo para concursos y conciertos. Se ha presentado en Centroamérica, Canadá y Estados Unidos, pero de todos los escenarios el que le emociona más es Bellas Artes, donde soñaba presentarse desde pequeña. Finalmente, la oportunidad surgió por invitación del tenor mexicano Javier Camarena, con quien estuvo en contacto por redes sociales.
“Como que no me la creía y mi mente no lo procesaba”, recordó sobre su presentación en septiembre del año pasado. “Es que es México... (el Palacio) está hermoso, por dentro y por fuera”, agregó.
El año pasado, también ganó el primer lugar de la International Music Competition, llevándose el Gran Prize Virtuoso de la competencia realizada en Londres, cuyo concierto de gala se realizó en la capital británica en abril de este año.
“Estaba muy contenta de estar ahí y de estar con muchos chavos (chicos) que tocan piano”, dijo Hanneman. “Fue una experiencia muy divertida”.
Entre las piezas que más le gusta tocar, están el “Rondo Capriccioso” de Mendelssohn, el preludio “Las campanas de Moscú” de Rachmaninoff y “Gavota” de Manuel M. Ponce. Aunque no todo es música clásica; también le gusta el jazz y el pop, incluyendo artistas como Shawn Mendes, Harry Styles, Ariana Grande y Dua Lipa. De rock, lo clásico: Elvis Presley.
“Todos piensan que soy rara porque no me gusta el reggaetón, pero equis, que piensen que soy rara”, dijo la joven.
Entre los músicos mexicanos dijo que admira a Jesse & Joy, Lila Downs y Café Tacvba. Estos dos últimos se presentarán, al igual que ella, en el Cervantino.
“Me muero de ganas de ver a Café Tacvba”, dijo. Otro de los artistas al que espera ver en acción es el director venezolano Gustavo Dudamel con la Orquesta Filarmónica de Los Ángeles.
Hanneman tiene canales en plataformas de streaming como Spotify y YouTube, donde comparte videos de sus presentaciones, pero todavía no ha lanzado su álbum debut, algo que le gustaría hacer en el futuro.
Para sus conciertos en el Cervantino incluirá piezas de Bach, Beethoven, Chopin, Ponce y Mendelssohn. Tendrá cuatro fechas en Celaya, Irapuato, Guanajuato y León.
“Estoy muy emocionada, la verdad sí estoy un poco nerviosa porque es un festival muy importante, o el más importante del país, y hay muchos artistas”, dijo. “Amo Guanajuato”.