Muere el expresidente griego Christos Sartzetakis

El expresidente griego Christos Sartzetakis, un juez respetado por resistir las presiones de los dictadores militares que lo encarcelaron arbitrariamente en los años de 1960, ha muerto tras una larga hospitalización, se informó el jueves. Tenía 92 años.

Sartzetakis, que estaba en la unidad de cuidados intensivos del hospital ateniense Laiko, murió de insuficiencia respiratoria el jueves por la madrugada, dijo el hospital en un comunicado.

Nacido en abril de 1929, Sartzetakis ejerció el puesto en gran medida ceremonial de presidente de 1985 a 1990, una época de turbulencias en el país.

“Durante el período de 1989-90, en un clima de intensa tensión política, su trabajo para la formación de un gobierno fue impecable”, dijo el primer ministro Kyriakos Mitsotakis en un mensaje de condolencias a la familia.

Sartzetakis llegó a la atención pública por primera vez como juez investigador del asesinato en 1963 de político Grigoris Lambrakis por extremistas de derecha. Recibió elogios por resistir las intensas presiones políticas durante el caso Lambrakis, que generó protestas masivas y una crisis política.

“En tiempos difíciles para el país y la democracia, (Sartzetakis) manejó el caso del asesinato de Lambrakis como juez investigador con independencia y ética judicial ejemplares, por lo cual pagó un alto precio durante los años de la junta”, dijo la presidenta Katerina Sakellaropoulou en un comunicado. “Más adelante, como Presidente de la República, honró el cargo con su escrupulosidad, dedicación y alto sentido de la responsabilidad en el cumplimiento de sus deberes”.

Nacido en la ciudad norteña de Salónica, Sartzetakis estudió derecho y se incorporó a la judicatura en 1955. En 1968, la dictadura militar lo despojó de su cargo, lo arrestó, torturó y encarceló sin juicio. Liberado en 1971, regresó al poder judicial tras la caída de la junta en 1974 y llegó a la Corte Suprema en 1982. Fue postulado a la presidencia por el partido socialista PASOK en 1985 y ejerció el cargo hasta mayo de 1990.

Le sobreviven su esposa e hija.