Puerto Rico intenta recuperar cosechas perdidas por huracán
Un mes después del paso del huracán Fiona por Puerto Rico, la tormenta dejó daños por 159 millones de dólares en el sector agrícola de la isla al arrasar con plantíos de plátanos, bananas y otros cultivos, informa el secretario de Agricultura del territorio estadounidense
El huracán Fiona destruyó cosechas valuadas en 159 millones de dólares en Puerto Rico, luego de azotar hace un mes y arrasar con campos de plátanos, bananas y otros cultivos, dijo el martes el secretario de Agricultura de la isla.
El frágil sector agrícola del territorio estadounidense apenas comienza a recuperarse del paso de la tormenta de categoría 1 que el 18 de septiembre impactó la región suroccidental y desató lo que las autoridades describieron como inundaciones “históricas" y docenas de deslizamientos de tierra. Además destruyó más de 90% de los sembradíos en Puerto Rico.
“Muchos de nosotros subestimamos el fenómeno”, dijo Manuel Cidre, secretario del Departamento de Desarrollo Económico y Comercio. “Fue mucho más dañino en la agricultura del sur de lo que mucha gente pensó”.
Las intensas lluvias anegaron cientos de hectáreas (acres) de cultivos y los fuertes vientos derribaron los árboles jóvenes de bananas y plátanos, los cuales se doblan fácilmente con vientos constantes a partir de los 32 kilómetros por hora (20 mph), considerando el peso de la fruta que producen, dijo el agrónomo Peter Vivoni, presidente del Salón de la Fama de la Agricultura Puertorriqueña.
Los sembradíos de verduras y café también resultaron gravemente afectados, dijo el secretario de Agricultura, Ramón González.
Una mañana reciente en la localidad suroriental de Yabucoa, el agricultor Anastacio Silva Gómez inspeccionaba los daños que causó Fiona y recordó cómo la tormenta convirtió en un río la tierra que él había fertilizado una semana antes. Perdió 20.000 árboles jóvenes de plátanos y subrayó que vende el racimo a 10 dólares. También perdió tractores, fertilizantes, pesticidas y otros materiales.
“Fue demasiada lluvia”, dijo Silva. “La lluvia hizo estragos”
Silva y otras personas como él habían preparado la tierra para ampliar sus cultivos pero ya no podrán hacerlo debido a las fuertes pérdidas financieras, las cuales preocupan a muchos agricultores.
“¿Cómo se va a volver a levantar la agricultura si no hay semillas?" preguntó Vivoni, agregando que las autoridades deberían implementar un inventario de semillas en Puerto Rico.
Daños similares se reportaron en la localidad vecina de Maunabo, en la costa sur de la isla, donde viven unos 120 pequeños agricultores que producen plátanos, bananas, melones y pimientos.
Luis Monte Benjamín tenía una abundante cosecha de dos hectáreas (cinco acres) antes del paso de Fiona.
“¿Usted sabe qué es verlo así en el piso después de estar un año trabajándolo?" preguntó. “Los melones es lo que me dio pena a mí. ¡Unos melones!"
Por ahora, dijo que tiene planeado reponer algunas de sus pérdidas plantando un poco de maracuyá, la cual aseguró es más barata de cultivar.
La tormenta fue el desafío más reciente para el sector agrícola de Puerto Rico, que ha tenido dificultades para encontrar trabajadores que recolecten las cosechas y ante lo cual las autoridades se han visto obligadas en los últimos años a traer mano de obra de México y República Dominicana.
Pocos días después del paso de Fiona, el secretario de Agricultura anuncio un plan de asistencia por dos millones de dólares para los agricultores, miles de los cuales han solicitado la ayuda. Grupos de especialistas han estado inspeccionando las fincas en las últimas semanas y González anuncio el martes que esta semana se harán los pagos a productores de banana y plátano.