The Strokes acude a productor "unicornio" y llega al Grammy
Tomó dos décadas que The Strokes recibiera su primera nominación al Grammy y su vocalista principal, Julian Casablancas, apuesta a que se irán con las manos vacías
Tomó dos décadas que The Strokes recibieran su primera nominación al Grammy y su vocalista principal, Julian Casablancas, apuesta a que se irán con las manos vacías.
Con “The New Abnormal”, la banda competirá el 31 de enero por el premio al mejor álbum de rock con Fontaines D.C. (“A Hero’s Death”), Michael Kiwanuka (“Kiwanuka”), Grace Potter (“Daylight”) y Sturgill Simpson (“Sound & Fury”).
“Yo apuesto por Grace Potter”, dijo Casablancas a The Associated Press en una entrevista reciente. Si “The New Abnormal” hubiese sido colocado en la categoría de mejor álbum de música alternativa, tiene otro favorito: “Probablemente hincharía por Tame Impala”, dijo. “De cualquier modo perderíamos”.
“The New Abnormal” llegó a la casilla No. 8 de la lista de 200 discos de Billboard para todos los géneros, pero con este disco la banda encabezó tanto la lista de álbumes de rock como la de álbumes alternativos por primera vez desde 2011.
Las reseñas han sido en general positivas — no que a Casablancas esto le interese demasiado: “¿Me importa? No sé, probablemente. ¿Las leo? No”.
The Strokes ha estado con RCA toda su carrera y el copresidente del sello discográfico, John Fleckenstein, está encantado con el resultado, aunque frustrado de que la banda no pueda tocar en vivo en este momento.
“Estamos muy, muy complacidos de ver la reacción a este álbum”, dijo. “Este proyecto ha sido un éxito a muchos niveles para ellos. Nos alivia que sean reconocidos de este modo”.
Casablancas ha figurado antes en los Grammy. En 2014 ganó por su participación como invitado en “Random Access Memories” de Daft Punk, que se alzó como álbum del año. Pero The Strokes no había sido nunca nominado.
“No veo los Grammy como una especie de validación artística”, dijo el cantante. “Básicamente, te valida ante personas que no entienden realmente de música. Si eres un ‘artista nominado al Grammy’ es como, ‘uy, eres un artista serio’”.
“The New Abnormal” salió a la luz en abril — justo cuando la pandemia afectaba las vidas de todos — ofreciendo una mezcla de glam, punk, rock, new wave de los 80 y pop. El título, que en español quiere decir “La nueva anormalidad”, parecía profético.
Formada en 1998, la banda de Nueva York — que también incluye a los guitarristas Nick Valensi y Albert Hammond Jr., el bajista Nikolai Fraiture y el baterista Fabrizio Moretti — debutó en el 2001 con el álbum “Is This It”.
Aunque “The New Abnormal” es técnicamente su primer disco de larga duración en siete años, en 2016 The Strokes lanzó el EP “Future Present Past” y sus miembros han tenido varios proyectos por separado, incluyendo la banda experimental de Casablancas The Voidz.
Esta vez recurrieron al productor Rick Rubin, quien ha ayudado a pulir obras de artistas de primera línea como los Beastie Boys, Adele, The Chicks, Red Hot Chili Peppers y LL Cool J.
Casablancas llamó a Rubin “una leyenda” con la que siempre quisieron trabajar: “Es como esta figura de unicornio: alguien que te trae éxito sin mermarte artísticamente”.
Fleckenstein dijo que uno de los cambios más sutiles pero significativos que Rubin hizo fue permitir que la voz de Casablancas — a menudo distorsionada en trabajos previos — brillara con claridad.
“Esto sacó algo de The Strokes que nunca habíamos escuchado de una manera fresca, sin que perdiera la esencia de lo que hacen”, dijo Fleckenstein. “Fue una manera muy ingeniosa de abordarlo. Realmente funcionó”.
El álbum se apoya — como muchas producciones de The Strokes — en la música de los 80, con melodías de “Dancing With Myself” de Billy Idol y “The Ghost in You” de Psychedelic Furs. En una canción, Casablancas pregunta: “Las bandas de los 80, ¿a dónde se fueron?”
“Lo llevo en el subconsciente”, dijo sobre su influencia ochentera. “Cuando hago cosas de Voidz, trato de sobrepasar los límites tanto como puedo. Cuando estoy de vuelta en la montura de The Strokes, me dejo llevar por las armonías que son placeres culposos”.
Las letras exploran malestar, inacción, alienación. “Quiero nuevos amigos, pero ellos no me quieren a mí / Hacen planes mientras yo veo TV” es el coro de una canción. En “At the Door”, Casablancas sabe que es un alma perdida, pero ofrece esperanza: “Úsame como un remo / Alcanza la costa”.