Tribunal español desecha demanda contra cazatesoros de EEUU
Un tribunal español desestima una demanda contra cazadores de tesoros estadounidenses
Un tribunal español desestimó una demanda contra cazadores de tesoros estadounidenses que los acusaba de haber destruido un yacimiento arqueológico subacuático cuando saquearon un galeón hundido en busca de toneladas de monedas preciosas hace más de una década.
En 2007, la empresa Odyssey Marine Exploration, con sede en Florida recogió más de medio millón de monedas de plata y oro del fondo del Océano Atlántico tras descubrir un galeón español hundido. España impugnó la reclamación del tesoro por parte de la empresa, cuyo valor se estimaba en 500 millones de dólares. Tras una batalla legal de cinco años en los tribunales estadounidenses, Odyssey tuvo que devolver el tesoro a España en 2012.
Otro caso que investigaba si Odyssey había cometido un delito al supuestamente destruir el sitio submarino donde encontró el barco Nuestra Señora de las Mercedes fue desestimado en 2016. Ahora, otro tribunal ha dicho que una apelación presentada por arqueólogos españoles contra esa decisión también ha sido desestimada. Este fallo no puede apelarse.
En documentos judiciales vistos el martes por The Associated Press el panel de tres jueces que preside el tribunal en la ciudad española de Cádiz dijo que ya había pasado la prescripción de cinco años para el presunto delito. Pero los jueces también se quejaron de que una solicitud de 2013 hecha a Estados Unidos para que los propietarios de Odyssey fueran interrogados en el caso nunca fue atendida.
“Aunque debemos compartir con la recurrente su extrañeza, desconcierto y hasta enfado por la, llamémosla, insólita tramitación de esta causa… lo cierto es que carece de lógica continuar su tramitación si traemos a colación la institución de la prescripción”, escribieron los jueces.
Barcos británicos hundieron el galeón Nuestra Señora de las Mercedes cerca del Estrecho de Gibraltar en 1804. Transportaba 574.553 monedas de plata y 212 monedas de oro de metales extraídos y acuñados en los Andes.
A su regreso desde Estados Unidos, el tesoro recibió un hogar en el Museo Nacional de Arqueología Subacuática de España, en la ciudad mediterránea de Cartagena.