UE respalda limitar más las emisiones de efecto invernadero
En la lucha contra el cambio climático, los legisladores de la UE respaldan límites más estrictos a las emisiones de gases de efecto invernadero
Los legisladores de la Unión Europea redoblaron el miércoles la lucha contra el calentamiento global al exigir una mayor reducción de las emisiones de las centrales eléctricas, las fábricas y los aviones de la UE, y al aprobar un impuesto sin precedentes sobre las importaciones.
El Parlamento Europeo presentó un proyecto de ley que reduciría los gases de efecto invernadero de la UE en al menos un 55% para 2030 en comparación con 1990, en lugar del 40% acordado previamente.
La iniciativa también incluye una herramienta que permitiría a la UE aumentar los precios de algunos productos importados, entre ellos el acero y el aluminio, que se han librado de los costos asociados a la protección climática mientras los fabricantes en el bloque de 27 naciones los enfrentan.
El objetivo general es encaminar a la UE hacia la llamada neutralidad climática en 2050 y alentar a otros grandes contaminadores, incluidos Estados Unidos y China, a seguir su ejemplo.
La aprobación final del paquete legislativo, que ha estado sobre la mesa de negociaciones desde julio de 2021, requeriría que el Parlamento Europeo solucione las diferencias con los gobiernos nacionales del bloque sobre varios detalles, un proceso que probablemente dure varios meses más.
“Estamos dando un gran paso por el clima”, aseguró el legislador alemán Peter Liese, quien ayudó a impulsar el paquete a través de la Asamblea de la UE en Bruselas. “Estamos haciendo lo correcto”.
La UE busca mantener un papel de liderazgo en la batalla mundial contra las olas de calor, tormentas e inundaciones provocadas por el calentamiento global, fenómenos cada vez más frecuentes e intensos. Está programada para noviembre una conferencia climática clave de Naciones Unidas, en Egipto.
La iniciativa más ambiciosa de ley climática de la UE es parte de un impulso a la energía limpia que ha ganado impulso político como resultado de la invasión rusa de Ucrania, y el bloque se comprometió a abandonar los combustibles fósiles rusos a más tardar en 2027.
La UE acordó prohibir las importaciones de carbón ruso a partir de agosto e imponer un embargo contra la mayor parte del petróleo de Rusia durante los próximos ocho meses, de forma gradual.
Mientras tanto, Rusia redujo el suministro de gas natural a cinco países europeos, entre ellos Alemania e Italia, y cortó las entregas a seis países miembros de la UE.
Hace dos semanas, la asamblea de 705 escaños aprobó recortes más profundos en el dióxido de carbono de los automóviles, incluida una prohibición de la UE sobre la venta de automóviles nuevos con motores de combustión, a partir de 2035.
Se espera que el Parlamento vote los próximos meses sobre unos objetivos más ambiciosos para todo el bloque a fin de desarrollar fuentes de energía renovable, incluidas la energía eólica y solar.