Unilever dice estar "totalmente comprometida" con Israel
El director general de Unilever dice que la empresa global de bienes de consumo sigue “totalmente comprometida” con hacer negocios en Israel, distanciándose de los anuncios de esta semana de que la marca de helados Ben & Jerry de la empresa dejó de vender en asentamientos israelíes en la ocupada Cisjordania y el disputado este de Jerusalén
El director general de Unilever dijo el jueves que la empresa global de bienes de consumo sigue “totalmente comprometida” con hacer negocios en Israel distanciándose de los anuncios de esta semana de que la marca de helados Ben & Jerry de la empresa dejó de vender en asentamientos israelíes en la ocupada Cisjordania y el disputado este de Jerusalén
Sin embargo, Alan Jope no indicó si Unilever obligará a Ben & Jerry’s a revertir su controvertida decisión.
El anuncio de Ben & Jerry’s es una de las medidas más enérgicas implementadas por una empresa de renombre contra los asentamientos israelíes, que muchos en la comunidad internacional consideran ilegales. El gobierno condenó la decisión y acusó a la empresa de unirse a la campaña de boicot contra Israel dirigida por los palestinos. Además, ha exhortado a 35 estados en Estados Unidos con leyes antiboicot a sancionar a Unilever.
En conferencia con inversionistas, Jope dijo que Ben & Jerry’s, conocida por su activismo social, tomó la decisión por su cuenta.
Señaló que bajo el acuerdo de compra con Ben & Jerry’s en 2000, la icónica empresa de helados mantuvo amplia independencia sobre las políticas de justicia social y que Unilever respetaba ese acuerdo.
“Obviamente es un asunto complejo y sensible que desencadena sentimientos muy fuertes”, dijo el CEO. “Si hay un mensaje que quisiera enfatizar es que Unilever sigue totalmente comprometido con nuestro negocio en Israel”.
Eso incluye una nueva fábrica de rasuradoras de 35 millones de euros (41 millones de dólares), oficinas corporativas e instalaciones que emplean a unas 2.000 personas, cientos de millones de dólares de inversión y apoyo para “programas sociales”, dijo.
“No es nuestra intención” indagar regularmente en temas tan sensibles, agregó.
Se desconoce si sus declaraciones calmarán la indignación en Israel.
El primer ministro Naftali Bennett dijo a principios de semana que había hablado con Jope sobre lo que calificó como “una clara medida en contra de Israel”.
Bennett, un exlíder del movimiento de asentamientos de Cisjordania, dijo el jueves que Israel “usará las herramientas a su disposición, incluso legales, en este tema” y que quienes boicotean a Israel “necesitan saber que habrá un precio que pagar”.