El perturbador video de 2016 en el que Diddy golpea y patea a su exnovia Cassie Ventura
Las imágenes de vigilancia captadas en un hotel de Los Ángeles en marzo de 2016 muestran al magnate de la música envuelto en una toalla persiguiendo a Ventura por un pasillo, antes de atacarla cerca de los ascensores. Luego intenta arrastrarla de regreso por el pasillo
[Este artículo se publicó originalmente en mayo de 2024]
Perturbadoras imágenes muestran a Sean “Diddy” Combs golpeando y pateando a su exnovia Casandra “Cassie” Ventura, en el pasillo de un hotel en 2016.
Las imágenes, captadas desde múltiples ángulos y obtenidas por CNN, muestran el magnate de la música envuelto en una toalla persiguiendo a Ventura por el pasillo, antes de atacarla cerca de los ascensores. Luego intenta arrastrarla de regreso por el pasillo.
El incidente supuestamente tuvo lugar en el Hotel InterContinental en Century City, Los Ángeles. CNN verificó la ubicación basándose en fotografías accesibles al público del interior del antiguo hotel.
Después de empujar a Ventura al suelo, Combs recoge un bolso y una maleta del suelo cerca de los ascensores. Se da vuelta y la vuelve a patear mientras yace en el suelo.
Más tarde se ve a Ventura levantándose lentamente y recogiendo objetos del suelo antes de tomar el teléfono del hotel en la pared del pasillo cerca de los ascensores. Combs, todavía en toalla y calcetines, regresa.
Un espejo justo enfrente de la cámara de seguridad muestra a Combs empujando a Ventura. Luego se lo ve arrojándole un objeto.
Según CNN, Combs pagó al InterContinental Century City USD 50.000 por las imágenes de seguridad del pasillo.
El video parece corroborar varias acusaciones hechas en una demanda que Ventura interpuso en 2023, en la que afirmó que Combs la traficó, la violó y la golpeó en muchas ocasiones a lo largo de 10 años.
Según la denuncia, que cita que el altercado ocurrió “alrededor de marzo de 2016”, Combs se puso “extremadamente ebrio, golpeó a la señora Ventura en la cara y le dejó un ojo morado”.
Después de que el magnate se durmió, Ventura intentó salir de la habitación del hotel, pero él se despertó y “la siguió hasta el pasillo del hotel mientras le gritaba”, describía la denuncia.
“Él la agarró y luego tomó jarrones de vidrio en el pasillo y se los arrojó, causando que los vidrios se estrellaran a su alrededor mientras ella corría hacia el ascensor para escapar”, explica la denuncia.
La demanda también afirma que Combs involucó a la cantante en su “estilo de vida ostentoso, acelerado y lleno de drogas” poco después de que se conocieron, y la contrató para su sello en 2005, cuando ella tenía solo 19 años y él 37.
Ventura alegó que el patrón de abuso comenzó prácticamente desde el inicio de su relación y que, cuando ella intentó terminarla en 2018, él entró por la fuerza en su casa de Los Ángeles y la violó.
La demanda contra Combs se resolvió un día después de que ella la presentara por una cantidad de dinero no revelada.
Ventura reveló a CNN en ese momento que había decidido “resolver este asunto de manera amistosa”. Por su parte, el abogado de Combs manifestó que el acuerdo no era “de ninguna manera una admisión de delitos” y no cambió su negación de las acusaciones.
The Independent se puso en contacto con representantes de Combs y de Ventura en busca de comentarios sobre el incidente que se muestra en las imágenes de vigilancia.
Las imágenes se publicaron en medio de una serie de demandas civiles por tráfico sexual, abuso sexual y violación contra el rapero y magnate de la música, al que se le atribuye haber ayudado a lanzar las carreras de algunas de las estrellas más importantes de los últimos años.
Agentes federales del Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos allanaron dos de las casas del rapero en Los Ángeles y Miami el 25 de marzo, a medida que enfrenta una serie de acusaciones diversas. La serie de acusaciones se remontan a la década de 1990, cuando fundó su propio sello discográfico, Bad Boy Records.
Combs ha negado rotundamente todas las acusaciones en su contra. Sus abogados han calificado las demandas y sus acusaciones de trampas para ganar dinero, “infundadas” o “repugnantes”. Los fiscales federales no han acusado formalmente al artista de ningún delito.