Los familiares Luigi Mangione dicen estar “conmocionados y devastados” por su arresto por asesinato
El acusado de asesinar a Brian Thompson procede de una influyente familia de Baltimore vinculada desde hace tiempo al sistema de salud
La familia de Luigi Mangione no solo tenía acceso a la atención médica, sino que también podía donar más de un millón de dólares al sistema de salud.
Dichos datos fueron extraídos de un informe del lunes de The Baltimore Banner, en el que se cuenta la historia de la familia rica del joven acusado de asesinar al director ejecutivo de UnitedHealthcare Brian Thompson.
Tras conocerse la noticia de la detención de Mangione el lunes, su familia publicó un comunicado en el que expresaron su conmoción.
“Lamentablemente, no podemos hacer comentarios sobre la noticia de Luigi Mangione”, manifestaron en un texto que publicó en X Nino Mangione, primo de Luigi y miembro republicano de la cámara baja de la legislatura de Maryland. Agregaron: “Solo sabemos lo que hemos leído en los medios de comunicación”.
Destacaron: “Nuestra familia está conmocionada y devastada por la detención de Luigi. Le enviamos nuestras condolencias a los familiares de Brian Thompson, y le pedimos a la gente que rece por todos los implicados”.
Muchos especularon con que el asesino que grabó las palabras “negar”, “defender” y “declarar” en los casquillos encontrados en la escena del crimen sería alguien con mala suerte, otra víctima, quizá, del desigual y a veces insensible sistema de salud estadounidense.
Sin embargo, no es tan así.
“Cuando murió mi padre, a mis 11 años, no tenía ni cinco centavos, y aun así me hice millonario”, declaró la cabeza de la familia Mangione, Nick Mangione, aThe Baltimore Sun en 1995. “¿En qué otro país se puede hacer eso? No se me ocurre ninguno”.
Nick Mangione, hijo de un padre analfabeto, nació en el barrio Little Italy de Baltimore, antes de la Segunda Guerra Mundial. Tras servir como combatiente en el Pacífico, forjó su fortuna primero como trabajador independiente y más tarde como agente inmobiliario durante la época del baby boom.
Durante la década de 1990, los Mangione eran propietarios de complejos de golf, clubes de campo, hogares para ancianos y tres emisoras de radio de ideología conservadora, y, a veces, se enfrentaban con funcionarios municipales y del condado mientras Nick Mangione expandía su imperio empresarial.
Nick Mangione murió en 2008, dejando 37 nietos, entre ellos Luigi Mangione. A la familia le iba bastante bien, y crearon una fundación filantrópica que realizó donaciones al Greater Baltimore Medical Center y a otros hospitales e instituciones de salud, así como a la Baltimore Opera Company y al Walters Art Museum.
Incluso, en el Greater Baltimore Medical Center hay una sala de internación cuyo nombre es en honor a los Mangione, según informó el Banner.
No está claro cómo la historia personal de Luigi Mangione puede estar relacionada con el asesinato de Thompson. El sospechoso asistió a un costoso colegio privado de Baltimore, luego realizó una licenciatura en informática e ingeniería y trabajó como ingeniero de datos en California.
Sin embargo, sus amigos dijeron a HuffPost y The New York Times que había sufrido continuos dolores de espalda que le habían impedido hacer surf y habían afectado su vida sentimental. De hecho, se descubrió un perfil de Goodreads, que aparentemente pertenece a él, en el que hay registros de que leía libros sobre el dolor de espalda y cirugías de columna.
“Dijo que sus vértebras inferiores estaban desalineadas por casi tres centímetros, y creo que le causó una presión en los nervios, por lo que a veces estaba bien y, a veces, no”, contó R. J. Martin, fundador de un complejo de viviendas en Honolulu, donde Mangione vivió.
Agregó: “Él sabía que, con su dolor de espalda, salir con alguien y tener intimidad no era posible. Recuerdo que me lo dijo y se me partió el corazón”.
Mientras tanto, en el supuesto perfil de Goodreads de Mangione, se publicó una reseña positiva del manifiesto de Ted Kaczynski, más conocido como el Unabomber, cuyo odio a “la sociedad industrial y sus consecuencias” lo llevó a cometer una serie de atentados en los años 70, 80 y 90.
Traducción de María Luz Avila