Missouri ejecuta al reo Marcellus Williams pese a pruebas de ADN que ponían en duda su culpabilidad

Marcellus Williams, condenado a muerte en Missouri, fue ejecutado a pesar de que el fiscal del caso y la familia de la víctima habían solicitado clemencia para perdonarle la vida.

Williams, de 55 años, había sido declarado culpable del asesinato en 1998 de Lisha Gayle, antigua reportera del St Louis Post-Dispatch.

Sus últimas palabras fueron: “¡¡¡Alabado sea Alá en todo momento!!!”. El imán de Williams, Jalahii Kacem, lo visitó el martes de 11 a. m. a 12:30 p. m. Él y el hijo de Williams, Marcellus Williams Jr., se encontraban en la sala de ejecuciones cuando los funcionarios le administraron la inyección letal.

Su última comida se sirvió a las 10:53 a. m. e incluía alitas de pollo y patatas fritas.

La muerte de Williams es la tercera ejecución de Missouri este año y la decimoquinta del país. También fue una de las cinco ejecuciones que tendrían lugar en Estados Unidos en apenas una semana, comenzando el pasado viernes con Freddie Owens en Carolina del Sur. Travis Mullis, también preso del corredor de la muerte de Texas, fue ejecutado por matar a su hijo una hora después que Williams.

“Esta noche, todos somos testigos del grotesco ejercicio del poder estatal por parte de Missouri”, declaró en un comunicado la abogada de Williams, Tricia Rojo Bushnell. “Que no sea en vano. Esto nunca debería ocurrir, y no debemos permitir que continúe”.

La organización sin ánimo de lucro WEproject, que hizo campaña contra la muerte de Williams, informó que se entregaron más de un millón de peticiones a la oficina del gobernador de Missouri, Mike Parson, para suspender la ejecución.

Personalidades de alto nivel, como el empresario británico Richard Branson y la diputada demócrata por Missouri, Cori Bush, pidieron a Parson que perdonara la vida a Williams.

Pero tanto Parson como el Tribunal Supremo del estado se negaron a intervenir a pesar de que la petición de clemencia de Williams detallaba que los familiares de Gayle querían que se conmutara su pena por cadena perpetua sin libertad condicional.

Los abogados del recluso presentaron el lunes dos peticiones de última hora ante el Tribunal Supremo de Estados Unidos. Ambas fueron denegadas antes de que lo ejecutaran a las 6:10 p. m., hora del centro.

A la segunda petición, que se centraba en las nuevas pruebas de ADN y en las afirmaciones de los fiscales de que Williams podría haber sido inocente, se opusieron tres jueces: Ketanji Onyika Brown Jackson, Elena Kagan y Sonia Maria Sotomayor.

Los abogados de Williams alegaron que las pruebas de ADN del cuchillo utilizado en el ataque conducían a un perfil masculino desconocido y no coincidían con el de Williams. El tribunal rechazó una audiencia sobre el argumento el sábado.

“No hay base para que un tribunal declare que Williams es inocente, y ningún tribunal lo ha hecho”, escribió el juez del circuito del condado de St. Louis, Bruce Hilton. “Williams es culpable de asesinato en primer grado y fue sentenciado a muerte”.

Funcionarios de la fiscalía presentaron recientemente una petición para anular su condena.

Un juez de primera instancia aprobó su moción, pero el fiscal general de Missouri, Andrew Bailey, impugnó la decisión. El caso fue devuelto al mismo juez, que revocó su sentencia inicial.

Durante su juicio por asesinato, los abogados de Williams lo describieron como “un padre atento y cariñoso”. Sus familiares y amigos habían dicho que su ejecución tendría “consecuencias significativas en su familia”.

Antes de dejar el cargo, el gobernador de Missouri, Eric Greiten, dictó una suspensión de la ejecución de Williams en 2017. Nombró una comisión de investigación para que estudiara el caso y formulara una recomendación de clemencia. Tras su elección, el gobernador Parson disolvió la junta y levantó la suspensión en 2023.

Al describir el asesinato de Gayle durante el juicio, los fiscales dijeron que Williams irrumpió en su casa, oyó correr la ducha y encontró un cuchillo grande de carnicero. Gayle fue apuñalada 43 veces cuando bajó las escaleras. Williams le había robado el bolso y el portátil, según las autoridades.

Era la tercera vez que el Departamento Correccional de Missouri intentaba condenar a muerte a Williams. En 2015, el Tribunal Supremo del estado suspendió su ejecución para realizar más pruebas de ADN. En el segundo intento, Greiten le concedió la suspensión.

En una entrevista con KSDK, Williams Jr. manifestó su intención de permanecer junto a su padre durante sus últimos momentos.

“Voy a mantenerme firme y demostrar a mi padre que no está solo”, afirmó.

The Independent y la organización sin ánimo de lucro Responsible Business Initiative for Justice (RBIJ) lanzaron una campaña conjunta para pedir el fin de la pena de muerte en Estados Unidos. La RBIJ ha atraído a más de 350 figuras conocidas para firmar su Declaración de Líderes Empresariales contra la Pena de Muerte, siendo ‘The Independent’ el último de la lista. Nos unimos a ejecutivos de alto nivel como Ariana Huffington, Sheryl Sandberg, de Facebook, y el fundador de Virgin Group, Richard Branson, como parte de esta iniciativa y nos comprometemos a resaltar las injusticias de la pena de muerte en nuestra cobertura.

_{Traducción de Michelle Padilla}