Rodney Alcalá era un soltero encantador que concursaba en un programa de citas. Resultó ser un asesino en serie
En 1978, Rodney Alcalá participó en el concurso de citas ‘The Dating Game’, donde compitió por salir con una soltera que quisiera casarse. Pasaría otro año antes de que alguien se enterara de que era uno de los asesinos en serie más conocidos de Estados Unidos. Andrea Cavallier repasa sus crímenes
Rodney Alcalá era alto, encantador y guapo: justo lo que los productores buscaban en un soltero para competir en su programa de citas.
Su encanto y sus ingeniosas bromas con la soltera del programa, Cheryl Bradshaw, le valieron la victoria.
Pero había algo en su comportamiento que inquietó a Bradshaw, y finalmente rechazó la cita, una decisión que podría haberle salvado la vida.
Alcalá tenía 35 años cuando apareció en The Dating Game en 1978. Para entonces ya había asesinado al menos a cinco personas, entre ellas un niño y una mujer embarazada.
El asesino del juego de las citas, una película dirigida y protagonizada por Anna Kendrick e inspirada en la participación de Alcalá en el programa de citas, se estrenó en Netflix de EE. UU. el viernes. También llegó a las salas de cines de algunos países, como México.
Antes del arresto de Alcalá en 1979, los productores del programa de citas no tenían idea de su escalofriante doble vida como un sádico asesino en serie ni de que había cumplido una condena en prisión por agredir sexualmente y golpear a una niña de ocho años.
Entre 1971 y 1979, Alcalá mató a ocho mujeres en Nueva York, California y Wyoming.
Se desconoce el número exacto de muertos, pero los investigadores creen que el hombre apodado “El asesino del juego de las citas” puede haber matado al menos a 100 personas.
Bradshaw era profesora de teatro cuando fue seleccionada para participar en The Dating Game en 1978, y eligió a Alcalá.
Al principio parecía encantada con Alcalá, pero después del programa rechazó la cita y le dijo a la coordinadora de concursantes Ellen Metzger: “No puedo salir con este chico. Tiene una vibra rara. Es muy extraño. No me siento cómoda”.
“Algo en él”, expresó Bradshaw más tarde en una entrevista. “Me di cuenta de que algo no estaba bien”.
¿Quién fue Rodney Alcalá?
Alcalá nació como Rodrigo Jacques Alcalá-Buquor el 23 de agosto de 1943 y vivió en México antes de mudarse a Los Ángeles con su familia cuando tenía ocho años.
Se unió al ejército a los 17 años, pero fue dado de baja en 1964 después de una crisis nerviosa y acusaciones de conducta sexual inapropiada, según CBS News.
Después de graduarse de la Universidad de California, asistió a la escuela de cine de la Universidad de Nueva York en 1971.
El 13 de septiembre de 1978, Alcalá participó en The Dating Game, un programa repleto de insinuaciones sexuales, en el que tres solteros elegibles competían por una cita con una soltera.
El presentador lo presentó como un “fotógrafo exitoso que comenzó cuando su padre lo encontró en el cuarto oscuro a la edad de 13 años, completamente desarrollado”.
Cuando Bradshaw le pidió que describiera qué tipo de comida sería, respondió: “Me llamo ‘El Plátano’ y tengo muy buena pinta […] Pélame”.
Antes incluso de aparecer en el programa, Alcalá ya había cumplido 34 meses de prisión por agredir sexualmente y golpear a Tali Shapiro, de ocho años.
Sin embargo, en ese entonces las verificaciones de antecedentes no estaban estandarizadas, por lo que los productores del programa desconocían su delito, que terminó en la lista de los diez fugitivos más buscados del FBI.
Alcalá fue finalmente arrestado en julio de 1979 por la violación y el asesinato de Robin Samsoe, de 12 años.
Se encontró que su ADN coincidía con la evidencia de otros cuatro asesinatos en el condado de Orange.
Víctimas y condenas
La lista de mujeres y niñas que Alcalá asesinó es larga e incluye violencia brutal, violación y acoso. Robin Samsoe, una niña de 12 años, se dirigía a su clase de ballet en Huntington Beach en 1979, cuando Alcalá la secuestró, según la policía de Huntington Beach.
En 2010, Alcalá fue declarado culpable de cinco cargos de asesinato en primer grado. Fue sentenciado a muerte por el asesinato de Samsoe, así como por las muertes en 1977 de Jill Barcomb, de 18 años, y Georgia Wixted, de 27 años, la muerte en 1978 de Charlotte Lamb, de 32 años, y la muerte en 1979 de Jill Parenteau, de 21 años, según el Departamento de Correcciones y Rehabilitación de California.
Barcomb era una neoyorquina de 18 años que se mudó a Los Ángeles con aspiraciones de convertirse en actriz de Hollywood cuando fue asesinada el 10 de noviembre de 1977, reveló el exfiscal Matt Murphy a A&E True Crime.
“La encontraron brutalmente agredida con múltiples ligaduras”, detalló. “Le habían destrozado la cara con una piedra”.
Ese mismo año, Alcalá agredió sexualmente, torturó y estranguló hasta la muerte a Georgia Wixted, una enfermera oncológica pediátrica de 27 años que acababa de mudarse a su propio apartamento en Los Ángeles.
En Nueva York, Alcalá fue sentenciado a entre 25 años y cadena perpetua en 2012 por los asesinatos de Cornelia Crilley y Ellen Jane Hover en la década de 1970.
En junio de 1971, Alcalá violó, mordió y estranguló a Cornelia Crilley, una azafata de TWA de 23 años, en su apartamento de Manhattan, según informes de los medios de comunicación de Nueva York.
En ese momento, era estudiante de cine en la Universidad de Nueva York y estudiaba con el director y productor de cine Roman Polanski.
Los investigadores se enterarían más tarde de que el trabajo de Alcalá como fotógrafo le daba fácil acceso a mujeres y niñas, incluidas algunas que luego se determinó que fueron sus víctimas.
En 1977, Alcalá mató a Ellen Jane Hover, de 23 años, una aspirante a directora musical que había desaparecido después de salir de su apartamento de Manhattan el 15 de julio de ese mismo año.
Un año después, sus restos fueron encontrados en los terrenos de la finca Rockefeller en el condado de Westchester, cerca de un área donde Alcalá a menudo fotografiaba mujeres.
En 2016, los fiscales de Wyoming acusaron a Alcalá de matar a Christine Ruth Thornton, una mujer de 28 años que estaba embarazada de seis meses cuando desapareció de su rancho de Wyoming en 1977. Sus restos fueron descubiertos cuatro años después.
Alcalá fue finalmente condenado a muerte en 2010 por los cinco asesinatos cometidos en California entre 1977 y 1979, aunque las autoridades estiman que puede haber asesinado a docenas de personas más en todo el país.
Los fiscales dijeron que Alcalá acechaba a las mujeres como si fueran presas y tomaba aretes como trofeos de algunas de sus víctimas.
“Estamos hablando de un tipo que anda cazando por el sur de California buscando gente para matar porque lo disfruta”, manifestó el fiscal del condado de Orange, California, Matt Murphy, durante su juicio.
Un almacén de horrores
Tras la condena de Alcalá, las autoridades publicaron más de 100 fotografías de mujeres jóvenes y niñas que fueron encontradas en el almacén del asesino en Seattle con la esperanza de vincularlo con otros asesinatos sin resolver en todo el país.
Algunas fotografías, que no fueron publicadas, mostraban a mujeres, hombres y niños en posiciones sexualmente explícitas y se cree que fueron guardadas como trofeos de los crímenes de Alcalá.
Las fotos se subieron a un álbum de Flickr y el Departamento de Policía de Huntington Beach pidió a las personas que se comuniquen con ellos si reconocen a alguien.
El 24 de julio de 2021, Alcalá murió por causas naturales mientras se encontraba en el corredor de la muerte. Tenía 77 años.
Cuando Tali Shapiro, la víctima sobreviviente, escuchó la noticia, dijo: “El planeta es un lugar mejor sin él, eso es seguro. He seguido adelante con mi vida, así que esto no me afecta. Tardó mucho en llegar, pero recibió su karma”.
Traducción de Michelle Padilla