Federación busca asegurar la seguridad de sus jugadoras.
La Federación de Fútbol de Estados Unidos introduce el programa Safe Soccer que requerirá un proceso de depuración integral de individuos relacionados al deporte, mientras la federación continúa abordando la investigación contra la conducta indebida de entrenadores de la National Women’s Soccer League
La Federación de Fútbol de Estados Unidos introdujo el programa Safe Soccer que requerirá un proceso de depuración integral de individuos relacionados al deporte, mientras la federación continúa abordando la investigación contra la conducta indebida de entrenadores de la National Women's Soccer League.
El programa Safe Soccer anunciado el lunes, busca reestructurar el criterio de participación en el deportes desde el nivel juvenil hasta las ligas profesionales. Incluirá capacitación de seguridad, comprobación de antecedentes y revisiones anuales.
Su aplicación comenzará con un programa piloto involucrando al personal de U.S. Soccer, pero eventualmente llegará a “todos los participantes del ecosistema del fútbol”, anunció la federación. Se cree que este proceso tomará años.
“Queremos asegurar que eliminaremos a los malos actores del deporte. Pero también queremos asegurarnos de incentivar, motivar y premiar a la gente que está haciendo lo correcto”, aseguró al exdefensa de la selección de Estados Unidos Danielle Slaton, quien es presidenta del Yates Implementation Committee de la Federación.
Tanto U.S. Soccer como la NWSL prometieron implementar las recomendaciones de dos duros reportes sobre el abuso sistémico y la mala conducta en la máxima liga profesional del país.
U.S. Soccer publicó sus resultados de la investigación que lideró la fiscal general Sally Q. Yates, en octubre. Otro reporte comisionado por la NWSL fue publicado en diciembre el sindicato de jugadores. Ambos buscan expandir y adoptar medidas para asegurar la seguridad de las jugadoras en el nuevo año.
Mana Shim y Sinead Farrelly, ambas jugadoras de la NWSL, acusaron públicamente en el 2021 de acoso y coerción sexual del entrenador Paul Riley. Estuvo entre los cinco entrenadores de los 10 en la liga que fueron despedidos o renunciaron ese año debido a las acusaciones de conducta impropia. Riley negó las acusaciones.