Balón de Oro: el Real Madrid boicotea la ceremonia por derrota de Vinicius Jr. y Rodri se lleva el galardón

Los jugadores del Real Madrid se ausentaron de la ceremonia del Balón de Oro en París después de que su delantero estrella Vinicius Jr. perdiera el premio ante Rodri, centrocampista del Manchester City y de la selección española.

La delegación del Real Madrid canceló su viaje a la ceremonia del lunes por la noche en el último minuto, cuando los “resultados filtrados” del prestigioso premio mostraron que Rodri había recibido el mayor número de votos por delante de Vinicius y Jude Bellingham.

Tras la derrota 4-0 del Real Madrid contra su rival, FC Barcelona, en el clásico del sábado por la noche, las redes sociales del club han estado inactivas y no han hecho publicaciones sobre la celebración del Balón de Oro.

Por su parte, después de desempeñar un papel estelar en los títulos del club en la Liga de Campeones y LaLiga la temporada pasada, el internacional brasileño Vinicius Jr. fue considerado durante mucho tiempo el favorito para ganar el Balón de Oro; sin embargo, el jugador de 24 años terminó segundo en la votación general.

En cambio, Rodri se convirtió, oficialmente, en el primer centrocampista defensivo que gana el Balón de Oro. El jugador de 28 años fue nombrado mejor jugador del torneo en la Eurocopa de este verano y ayudó al Manchester City a conquistar su cuarta Premier League consecutiva.

Rodri, quien no jugará por el resto de la temporada debido a una lesión en el ligamento cruzado anterior, se convirtió apenas en el quinto jugador distinto a Lionel Messi y Cristiano Ronaldo que gana el premio individual desde 2007.

El Real Madrid tenía previsto viajar a París para asistir a la ceremonia hasta que se supo que Vinicius no recibiría el máximo galardón. Y aunque el equipo fue nombrado mejor club masculino del año tras ganar su 15ª Copa de Europa y su 36ª liga española, no se presentó nadie del club para recibir el premio y la ceremonia siguió adelante rápidamente.

Del mismo modo, Kylian Mbappé fue nombrado correceptor del Trofeo Gerd Müller junto con Harry Kane, pero brilló por su ausencia mientras el delantero inglés subía al escenario para una entrevista y un montaje de video.

Quizás aún más incómodo, el anfitrión del Balón de Oro, Didier Drogba, esperaba claramente la presencia de Carlo Ancelloti para recoger el premio al mejor entrenador del año, pero el técnico italiano también se sumó al boicot con su equipo, el Real Madrid.

La votación del Balón de Oro la determina un jurado de periodistas de los 100 mejores países en la clasificación de la FIFA, y Rodri recibió emocionado el histórico premio en el Teatro du Chatelet. Rodri subió al escenario con muletas debido a su lesión de rodilla.

“Tengo tantas cosas que agradecer a la gente”, exclamó en el escenario. “En primer lugar, a France Football y a la UEFA por haberme concedido este premio. Quiero dar las gracias a los que votaron y confían en mí. Hoy es un día muy especial para mí, para mi familia y para mi país”.

“Me gustaría dar las gracias a la persona más importante del mundo para mí, mi novia Laura. Hoy es nuestro aniversario y sin ella las cosas no habrían sido lo mismo. Gracias”.

“También a mi familia, por supuesto. Por los valores que me han enseñado y por todo lo que representan en mí, por haberme enseñado los pasos a seguir y por ayudarme a ser el hombre que soy […]”.

“No quiero olvidarme de mis compañeros, entiendo que es un juego de grupo. El Manchester City es muy especial, sé que no lo conseguiría sin ustedes. Para mí es el mejor club del mundo, y gracias a ellos las cosas son mucho más fáciles”.

“La selección y Luis [de la Fuente, director técnico], por confiar en mí durante tanto tiempo, tengo que mencionar a mis compañeros con los que ganamos la Eurocopa. Esto no es solo por mí, sino por el fútbol español”.

Otro jugador estrella que no estuvo presente en la ceremonia fue el delantero del Manchester City Erling Haaland, que en su lugar viajó a Suecia para ver ganar la liga a su antiguo club, el Malmo.

Haaland, subcampeón del Balón de Oro la temporada pasada, viajó a Malmo antes del partido contra su rival, el IFK Gotemburgo, en el que una victoria selló su segundo título consecutivo de la Allsvenskan y el cuarto en cinco años.

Traducción de Sara Pignatiello