Griezmann lo da todo para que Francia esté en la final

Carreras veloces, tacleadas clave, intercepciones en el momento preciso, pases en calma.

Antoine Griezmann lo hizo todo con Francia el miércoles y ahora disputará su segunda final de la Copa Mundial.

Griezmann tuvo momentos excepcionales en ambas áreas penales —y realmente, en todos los rincones del campo— para ayudar a Francia a superar a un impresionante Marruecos por 2-0 en las semifinales en el Estadio Al Bayt.

Fue una demostración completa de un talentoso jugador, quien se reinventó en el Mundial de este año. Y ahora intentará negarle a Lionel Messi, su excompañero en el Barcelona, su primer título de Copa Mundial el domingo.

Griezmann jugó como extremo en el Mundial 2014 y fue una clave amenaza anotadora con Francia en su paso para ganar el título en el 2018. Ahora juega de centrocampista creando oportunidades para sus compañeros y sofocando las amenazas de sus rivales.

Fue su carrera perfectamente sincronizada para superar la defensa marroquí para colocar el balón en el área penal y que llevó al primer gol el miércoles. Theo Hernández fue el beneficiado al minuto cinco.

Cuando Marruecos presionó a Francia en la parte complementaria, Griezmann respondió con tacleadas, cabezazos y bloqueos. Necesitaron de toda su energía hasta que aseguraron el triunfo con el impacto instantáneo del suplente Randal Kolo Muani —quien anotó a los 79 minutos.

Cuando todo acabó, Griezmann levantó lentamente sus brazos y caminó a través del campo para abrazar al defensa Ibrahima Konaté, quien también contuvo los persistentes ataques de Marruecos.

Griezmann después consoló a sus rivales y buscó al portero Yassine Bounou, quien también juega en la liga española.

Griezmann se ha convertido en el perfecto ejemplo de la evolución de Francia tras 10 años bajo el mando de Didier Deschamps.

El equipo alcanzó los cuartos de final en el 2014, disputó la final del Campeonato Europeo 2016, que perdió ante Portugal en París. Francia siguió con el título del Mundial en el 2018 y ahora tendrá la oportunidad de ganar su tercer campeonato el domingo ante Argentina en el Estadio Lusail.

La columna vertebral del equipo —el portero Hugo Lloris, el central Raphaël Varane, Griezmann y el delantero Olivier Giroud— ha sido una presencia constante. La explosiva velocidad de Mbappé y los goles llegaron en el 2017 y los ha llevado a la gloria en la segunda mitad de la era Deschamps.

El domingo podrían agregar más a la ya de por si impresionante lista de logros.