La mejor rivalidad de la pista está en los 1.500: Kerr e Ingebrigtsen realmente no se agradan
Tal vez fue el momento en que Jakob Ingebrigtsen comenzó a festejar para la multitud antes de cruzar la línea de meta y vencer a Josh Kerr.
O tal vez cuando Kerr venció a Ingebrigtsen tres noches después con una medalla de oro en juego, y Ingebrigtsen atribuyó la derrota a estar enfermo.
Es difícil determinar el punto exacto en el que los dos mejores corredores de los 1.500 metros del mundo empezaron a detestarse. A veces, han insistido en que no se conocen lo suficientemente bien.
En la final en Saint-Denis este martes se espera que el enfrentamiento entre el campeón olímpico noruego y el actual campeón mundial escocés saque chispas.
“Deberían estar esperando uno de los 1.500 más crueles y duros que el deporte ha visto en mucho tiempo”, dijo Kerr el domingo, después de que Ingebrigtsen lo superó en la semifinal.
Aquí un vistazo a algunos de los aspectos más destacados, y los más bajos, del año pasado entre Ingebrigtsen y Kerr.
Mientras doblaba la última curva en las semifinales del campeonato mundial de 2023, Ingebrigtsen estaba más concentrado en la multitud que en la competencia. Se giró hacia las gradas e hizo un gesto con los brazos para que los aficionados se levantaran de sus asientos. Luego, prestando poca atención, pasó a Kerr y a algunos otros para terminar primero.
Kerr, quien sugiere que el éxito de Ingebrigtsen durante todos estos años ha sido en gran medida gracias a los llamados “pacers”, fue el último en reír al derrotar a Ingebrigtsen en la final, realizada en Budapest, Hungría.
Si Kerr vence a Ingebrigtsen en los 1.500 metros el martes, tendrá la medalla de oro, pero los partidarios de Ingebrigtsen mencionarán que el escocés todavía tendrá marca de 4-13 de por vida contra su hombre en los 1.500 metros y la milla.