La Messidependencia da paso a la Dibudependencia en Argentina
Lionel Scaloni no ocultó su contrariedad por el suplicio que vivió Argentina para instalarse en las semifinales de la Copa América.
“Esta vez no disfruté nada”, dijo el técnico de la reinante campeona del mundo y continental. "Estamos contentos, por supuesto, pero esta vez no la pasé bien”.
Después de 90 minutos de un desteñido desempeño frente a Ecuador, la Albiceleste sobrevivió gracias a otra actuación monumental de su arquero Emiliano Martínez.
En una tanda de penales que arrancó con el astro Lionel Messi picando el balón contra el travesaño, el “Dibu” se agrandó una vez más al tapar los remates de Ángel Mena y Alan Minda para que Argentina saliera victoriosa 4-2. Los ecuatorianos forzaron los penales con un gol en los descuentos para el 1-1 en el tiempo reglamentario.
“Nacimos para sufrir", resumió el volante argentino Rodrigo De Paul. “Tenemos un animal en el arco”.
¿Debió sufrir tanto Argentina?
Superado el alivio por seguir en carrera en Estados Unidos, es evidente que Scaloni tendrá que replantearse varios aspectos en su armado si es que su equipo pretende revalidar el título continental y quedar como el más laureado en la historia del torneo con 16 coronas.
DIBUDEPENDENCIA
La noche del jueves en Houston plasmó un súbito vuelco en Argentina: la Messidependencia ha dado paso a la Dibudependencia.
El arquero fue el auténtico — y casi que exclusivo — artífice de la clasificación a semifinales, por su inmensa personalidad, reflejos y liderazgo.
Contra Ecuador, el “Dibu” reeditó su memorable atajada a Randal Kolo Muani en la agonía de la prórroga de la final del pasado Mundial cuando estiró la pierna izquierda para desviar el remate de Jeremy Sarmiento en el primer tiempo.
Y no hay nadie como él a la hora de los penales. Hace temblar a los pateadores rivales, sin importar que el reglamento fue modificado para que se quede estático en la raya. Al tratar de rematar al ángulo, Enner Valencia malogró una pena máxima en el segundo tiempo. Después que Messi falló su remate en la tanda, Martínez se tiró a la izquierda para atajar el remate Mena y luego a la derecha para repeler el de Minda.
“Me dio mucha bronca haber errado el penal, pero al mismo tiempo estaba tranquilo”, dijo Messi. "Sabemos de lo que es capaz el ‘Dibu’, que en estos momentos se agranda y lo disfruta”.
“Es difícil patearle un penal porque es grande, es rápido y aparte el que va a patear sabe que es atajador”, añadió. "Incluso antes que yo erré, antes del partido, estaba seguro y confiado que si íbamos a los penales, siempre dice que uno o dos agarra. Y después lo cumple”
LA INCÓGNITA MESSI
Argentina jugó mal ante Ecuador, por una diversidad de factores.
Y la principal obedeció a que Messi fue casi un fantasma en la cancha. El capitán reapareció tras sufrir una dolencia muscular en la pierna derecha en el segundo partido, y se notó a leguas que le faltaba movilidad y lucidez. Su único aporte fue el córner que ejecutó para que Lisandro Martínez abriese el marcador con un cabezazo en el primer tiempo.
Quedó la sensación de que el 10 no estaba del todo fino para la exigencia del cruce contra Ecuador, que Ángel Di María debió ser el titular en su lugar, dejando a Messi como revulsivo para la segunda parte.
Tanto el técnico como el jugador insistieron que no hay problemas en lo físico.
“Me sentía bien, no tenía molestias, nada. Por ahí sí un poco del miedo psicológico de tener una lesión o una molestia siempre está, pero a nivel muscular no tenía nada", aseveró Messi.
EL MEDIO DESAFINA
Desde que empezó la copa, Scaloni mueve y mueve en la zona de mediocampistas y no termina de dar con la tecla.
Decidió jugársela otra vez con Enzo Fernández, quien fue operado de la ingle y se perdió el final de su temporada con Chelsea. Pero su nivel dista mucho de lo mostrado en el Mundial de Qatar. Tampoco lo mostrado por De Paul, Leandro Paredes y Giovani Lo Celso ha sido para destacar. De momento, Alexis Mac Allister ha sido el único que ha dado la talla.
Argentina necesita que ellos jueguen bien para que Messi esté bien.