Sueños de boxeo perduran en Congo, 50 años después de pelea Ali-Foreman
Un puñetazo golpea el rostro de Daniella Muleketsi, quien frunce el ceño por el dolor. La multitud contiene la respiración por temor a que sea derrotada su esperanza local de boxeo.
Es la primera pelea profesional de Muleketsi, de 20 años, y se realiza en Goma, su ciudad natal en el oriente del Congo. Es una marca que quedará para siempre en su récord: un debut triunfal o una derrota amarga.
Este torneo se llevó a cabo durante el fin de semana en el Club de Boxeo Nyama para recordar quizá la pelea más grande de la historia. Muhammad Ali llegó a este país centroafricano y venció al entonces invicto George Foreman en el “Rumble in the Jungle” el 30 de octubre de 1974, para volver a coronarse campeón mundial indiscutido de los pesados.
Esa pelea, hace medio siglo, convirtió a Ali en una leyenda. También ofreció un vistazo del Congo, entonces llamado Zaire y dominado por el dictador Mobutu Sese Seko.
Mientras el Congo conmemoró el 50 aniversario del Rumble el miércoles, los sueños de boxeo siguen vivos no solo en la capital, Kinshasa —donde se celebró la pelea Ali-Foreman— sino también en promociones de nuevos talentos, como la de Nyama en Goma, una ciudad en el corazón de una región que ha atravesado por décadas de conflicto, desplazamiento y crisis.
Aunque esa sombra de sufrimiento y dificultad cubre casi todo lo que sucede en Goma ahora, el torneo de boxeo atrajo a una multitud sorprendentemente numerosa y entusiasta al estadio al aire libre en el barrio de Volcans.
En el ring, la congoleña Muleketsi se recuperó del golpe que la hizo retroceder y se impuso ante su oponente más experimentada, la keniana “Scary” Charity Mukami.
Mukami es una veterana de 12 peleas y alguna vez fue contendiente a títulos mundiales. Muleketsi se abrió camino hacia una victoria por puntos y un debut profesional victorioso.
El réferi levantó su brazo derecho mientras Muleketsi se deleitaba escuchando los aplausos y vítores. Sostenía una bandera congoleña azul, roja y amarilla en su otra mano.
“Mi objetivo es ser algún día campeona mundial. No dejaré de trabajar hasta conseguirlo”, dijo Muleketsi, que mide 1,60 metros, pesa 74 kilogramos (163 libras) y comenzó a boxear a los 16 años bajo la tutela de su tío, un dirigente de boxeo regional.
Ella no había nacido cuando Ali venció a Foreman, pero ha escuchado, como muchos congoleños, las historias del Rumble in the Jungle.
“La pelea del siglo entre Mohammed Ali y George Foreman inspira a cada boxeador profesional”, dijo. “Quiero que mi nombre esté registrado en el boxeo de mi país y en todo el mundo.”