Texans llevan la defensa enjambre de Ryans al duelo divisional contra Kansas City

Antes de la temporada pasada, cuando DeMeco Ryans se convirtió en entrenador de los Texans de Houston, el ex linebacker elegido al Pro Bowl trajo consigo su defensa enjambre.

Se trata de una identidad que los Texans han adoptado mientras se preparan para su segundo viaje consecutivo a la ronda divisional de los playoffs, donde se enfrentarán el sábado a los Chiefs de Kansas City.

“Realmente no puedes salir allí si no estás comprometido”, dijo Ryans.

Y aunque cada miembro de la defensa ha adoptado el estilo agresivo de Ryans, hay un jugador que lo personifica como ninguno otro.

“Will, siempre”, dijo el esquinero Derek Stingley sobre el ala defensiva Will Anderson Jr., novato Defensivo del Año de la AP del año pasado, quien ha llevado su juego a otro nivel esta temporada.

Logró 1½ capturas la semana pasada después de acumular 11 en la temporada regular.

Anderson describió lo que significa para él jugar la defensa enjambre.

“Hacer lo que sea necesario para conseguir el balón, atacando el balón”, explicó. “Tenemos este dicho en nuestra sala de la línea defensiva: ‘¿quién va a iniciar con esto?’ Quien lo haga, eso es enjambre. ¿Quién va a hacer la gran jugada? Y siento que hay muchos chicos en la defensa que lo inician, que hacen el enjambre”.

Los Texans interceptaron cuatro envíos de Justin Herbert, la peor cifra en la carrera del quarterback, incluyendo uno que fue devuelto para anotar, en la victoria de la semana pasada sobre los Chargers.

Herbert había sufrido sólo tres intercepciones en toda la temporada. Los cuatro arrebatos de balón por parte de Houston en la primera semana de los playoffs igualaron a Filadelfia con la mayor cantidad en la NFL.

La actuación llegó después de que Houston se situó quinto de la liga en la temporada regular, al forzar 29 pérdidas de balón. Stingley, quien consiguió dos de las intercepciones la semana pasada, un día después de recibir los honores de All-Pro de la AP, compartió sus impresiones sobre la mentalidad defensiva del equipo.

“Realmente se reduce a si te dijera que ésta es la última vez que vas a hacer algo. ¿Cómo lo harías?”, dijo Stingley. “Es tan simple como eso. Sólo haz eso en cada jugada”.

Ryans dijo que realmente no hay ningún secreto sobre por qué su equipo tiene tal habilidad para forzar pérdidas de balón. Cree que es porque tiene buenos jugadores, y lo enfatizan en la práctica, lo cual se traduce en los encuentros.

“Es la cosa principal de la que hablamos cada semana, atacar el balón, tomar el balón”, dijo Ryans. “Porque sabemos que, cuando quitas el balón, simplemente aumentas tus probabilidades de ganar los partidos de fútbol americano... es la defensa ayudando al equipo a ganar el duelo”.

Aunque todas las tomas de balón de Houston la semana pasada fueron por intercepciones, Stingley enfatizó que esas jugadas no habrían ocurrido si no fuera por la presión que la línea defensiva ejerció sobre Herbert. Los Texans lo capturaron cuatro veces y lo golpearon otras nueve en la victoria por 32-12.

“La defensa comienza con ellos al frente”, dijo Stingley. “Están haciendo su trabajo y eso simplemente nos facilita las cosas en la retaguardia”.

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Esta historia fue traducida del inglés por un editor de AP con la ayuda de una herramienta de inteligencia artificial generativa.