Bradley Cooper habla sobre su adicción a la cocaína: “Ninguna chica quería mirarme”
“Estaba totalmente deprimido”
Bradley Cooper se sinceró sobre su adicción a la cocaína a lo largo de sus veinte años y sobre cómo una conversación con Will Arnett le ayudó a estar sobrio.
El actor, de 47 años, reflexionó sobre el inicio de su carrera y su camino hacia la sobriedad durante una reciente aparición en el podcast de Jason Bateman y Sean Hayes, Smartless. Según Cooper, a los 29 años tenía un sentido del humor bastante mezquino, ya que Arnett le había dicho anteriormente que estaba llevando sus bromas demasiado lejos y le llamó “un verdadero imbécil”.
El cineasta continuó señalando que se encontraba en un punto en el que tenía “cero autoestima” y no creía que estuviera “haciendo daño a nadie” porque sentía que “no valía nada”, antes de hablar de su adicción y de lo mucho que estaba luchando mentalmente.
“Estaba tan perdido y era adicto a la cocaína”, explicó, señalando cómo también se había “roto el tendón de Aquiles” y había sido “despedido/renunciado” de la serie Alias, a principios de la década de 2000.
Cooper reconoció que había un “beneficio” de luchar contra su adicción cuando lo hizo, ya que aún no había “triunfado” en su carrera. Sin embargo, también confesó que cuando se trasladó a Los Ángeles para rodar Alias, se sintió como si estuviera “de vuelta en la prepa” y estaba “totalmente deprimido”.
“No podía entrar en ningún club, ninguna chica quería mirarme. Estaba totalmente deprimido”, explicó, y añadió que no sintió el éxito hasta que protagonizó The Hangover a los 36 años.
“Así que tuve que pasar por todas esas cosas antes de que la fama tuviera un lugar en mi existencia a nivel diario”, continuó. “Así que todo eso ocurrió antes de todo eso”.
Cooper destacó entonces cómo su conversación con Arnett fue un momento de autorrealización, en el que echó un vistazo a su comportamiento y descubrió que necesitaba hacer un cambio.
“Definitivamente, hice grandes avances entre los 29 y los 33, 34 años, en los que al menos fui capaz de ponerme delante de alguien y respirar y escuchar y hablar”, señaló.
“Will es la razón, ya que tomó ese riesgo de tener una conversación dura conmigo, como en julio de 2004, que me puso en el camino de decidir cambiar mi vida”, agregó. “Es realmente Will Arnett, él es la razón”.
En respuesta, Arnett expresó lo orgulloso que ha estado de Cooper a lo largo de los años.
“Ha sido increíble verle en este lugar y verle cómodo. Nada me ha hecho más feliz”, manifestó Arnett. “Me ha hecho feliz verte tan feliz con lo que eres”.
En otra parte de la entrevista, la estrella de American Sniper destacó que actualmente está trabajando en Nueva York para una película y pasando tiempo con su hija de cinco años, Lea, que comparte con su exnovia, Irina Shayk.
También señaló que, a lo largo de su apretada agenda, se ha centrado en mantenerse sobrio, lo que le ha animado a pedir ayuda a los demás.
“Aquí hay otra cosa sobre estar sobrio y tener humildad: [ahora] me doy cuenta de que no puedo hacer esta película y cuidar de Lea sin ninguna ayuda”, subrayó. “Así que, literalmente, esta noche, como a minutos de distancia, viene alguien que se va a quedar en Nueva York y va a ayudar hasta el final del rodaje. Algo que nunca habría hecho, pero gracias a Dios lo estoy haciendo”.