Jamie Lee Curtis: ‘¿Te imaginas estar casado conmigo? ¿Te imaginas ser mi hijo?’
Recién llegada de recibir un premio a la trayectoria en el Festival de Cine de Venecia, la estrella de 'Halloween Kills' habla con James Mottram sobre MeToo, su sobriedad y su regreso a la franquicia que lanzó su carrera hace 43 años
Jamie Lee Curtis me hace señas para que me acerque a un diván circular en la terraza del hotel Excelsior en el Lido de Venecia. Está acostada, le duele un poco la espalda, y me invita a acostarme con ella. Si mi yo de quince años pudiera verme ahora. Curtis está aquí por dos razones: para recoger el León de Oro Honorífico, un merecido premio a la trayectoria, y para el estreno de Halloween Kills, la última película en la franquicia de terror que lanzó su carrera hace cuarenta y tres años.
“Estoy acostada aquí contigo en el Festival de Cine de Venecia, un festival en el que nunca he estado, un festival al que nunca me han invitado, un festival en el que nunca he filmado”, dice. "Y aquí estoy contigo por la película ‘Halloween’ de 1978". El filme de horror de bajo presupuesto de John Carpenter eligió a Curtis como Laurie Strode, la niñera perseguida por el asesino con máscara Michael Myers.
Esta tensa historia suburbana inspiró a una generación de películas de terror, coqueteó con lo sobrenatural y vio a Curtis ofrecer una evocación gélida del miedo puro. Se convirtió en un éxito de boca en boca y, de repente, Curtis, la hija de los íconos de Hollywood Tony Curtis y Janet Leigh, tuvo una carrera.
Aunque Curtis regresó para Halloween II de 1981, se alejó de forma sabia de la franquicia, que dio lugar a numerosas secuelas con grandes ganancias. En cambio, disfrutó de una carrera estelar a lo largo de los años ochenta, noventa y más allá en comedias como Trading Places y Freaky Friday, el thriller de autor de Kathryn Bigelow Blue Steel, la espectacular película de acción de James Cameron True Lies y, hace poco, el exitoso misterio de asesinato de Rian Johnson Knives Out.
En 1998, Curtis volvió a encarnar a Laurie Strode con Halloween: H20, a pesar de haber sido asesinada algunas películas antes. Los cineastas solucionaron eso al revelar que ella había fingido su propia muerte y trabajaba como directora en una escuela de California. La película costó unos US$55 millones. Cuando la franquicia se reinició una vez más, en 2007, Curtis no regresó.
Fue solo cuando se reunió con el director David Gordon Green (Stronger) que se convenció de interpretar a Strode una vez más: una versión más antigua, que se ha atrincherado, marcadade forma permanente por sus enredos adolescentes con Myers. La película resultante, Halloween de 2018, ignoró en gran medida la continuidad ahora sesgada de las películas anteriores. Se convirtió en el mayor éxito de la serie al recaduar US$159 millones.
Lidiar con el trauma femenino se sintió muy oportuno, ya que llegó después de las acusaciones de abuso sexual en Hollywood que habían llevado al movimiento MeToo. Laurie era vulnerable, frágil, abusada. “Todas las mujeres involucradas en el movimiento ‘MeToo’ fueron víctimas de abuso, de cualquier tipo: abuso sexual, abuso físico, abuso profesional”, dice Curtis. “Fueron víctimas de un poder mayor que ellas. Con el coraje de unas pocas, las mujeres comenzaron a retirar la narrativa del perpetrador y han podido ponerse de pie”.
Halloween Kills, que retoma de forma directa el final de la película de Green de 2018, ve a una Strode herida y hospitalizada mientras la gente del pueblo se lanza al alboroto en busca de Myers. La película fue filmada antes de las reuniones de Black Lives Matter y las protestas por el cambio climático que han dominado los titulares durante los últimos dieciocho meses. Curtis cree que esta trilogía, la tercera parte, Halloween Ends, llega el próximo año, refleja el cambio social. “Estamos viendo, en todo el mundo, la ira de la comunidad colectiva contra la máquina, contra el sistema. Hay una línea en Halloween Kills: 'El sistema está roto'. Y la gente se está levantando en todo el mundo, diciendo 'El sistema está roto'. Es fascinante para mí".
Nacida en Santa Monica, Curtis fue criada en gran parte por su madre después de que sus padres se separaron cuando ella era joven. Mientras que su padre participó en clásicos famosos de los años cincuenta como Some Like It Hot y Sweet Smell of Success, su madre aún es mejor conocida por interpretar a la víctima en la escena de la ducha en Psycho de Hitchcock. ¿Estuvo esto alguna vez en su mente durante todos esos años en que huía de Laurie Strode? “Oh, sin duda, por supuesto. Sin duda."
Curtis habla rápido, con un perverso sentido del humor. Habla de su nombre. “Odiaba Jamie cuando era niña, quería que me llamaran Jane”, dice. “Durante una semana, creo que les dije a mis padres: 'Quiero ser Janey'. Ellos dijeron, 'Está bien'. Y creo que me llamaron Janey como por un día. Y luego se volvió estúpido. La única buena noticia al respecto es que mi esposo me llama Janey, en momentos íntimos. Este es su estilo específico de humor brillante. En ese momento en el que no quieras reírte, él dirá: 'Oh, Janey', y me hará reír".
Su esposo es Christopher Guest, co-creador de la banda ficticia de heavy metal Spinal Tap, quien podría presumir de ser uno de los hombres más divertidos del planeta. La vida en su hogar debe ser algo extraordinario. "Esta soy yo con unas tres horas de sueño en 48 horas", dice Curtis. “¿Te imaginas estar casado conmigo? ¿Te imaginas ser mi hijo? Soy esta persona el noventa por ciento del tiempo. Tengo tanta energía, tengo tanto enfoque y empuje. ¿Sabes por qué? Mi lema es: ‘Si no es ahora, ¿cuándo? Si no soy yo, ¿quién?’ Quiero manifestar mi destino, de manera creativa, mientras estoy aquí".
No le teme a la honestidad, dice que intentó la cirugía plástica en el pasado, pero no fue para ella. “Me hizo adicta al Vicodin”, reveló más tarde. Ahora ella es como un dínamo. “Más porque estoy sobria”, dice ahora. “Tengo veintitrés años sobria. Estoy casada desde hace treinta y siete años. Soy sólida en mi matrimonio. Tengo dos hijos [Annie y Ruby]. Yo los crié. Ambos son adultos. Ellos son increíbles." La lealtad es enorme para ella. "Trabajo con las mismas personas durante años". Ha estado con el mismo publicista, peluquero y abogado durante décadas.
Curtis, que acaba de rodar Borderlands de Eli Roth, una adaptación del exitoso videojuego, está muy entusiasmada con la vida en este momento. “Estoy liberada. Estoy liberada de cualquier artificio. Estoy en total aceptación de quién soy, qué puedo y qué no puedo hacer. Yo sé quién soy. Y sé quién no soy. Y creo que la liberación de la autoaceptación, que viene con la edad y la experiencia, me ha liberado para ser más creativa hoy que desde que tenía diecinueve años ".
Ella procede a relatar sus proyectos actuales. Escribe un guión que quiere dirigir y trabaja con Blumhouse, la empresa de gran éxito detrás de Get Out y Paranormal Activity . “Hice un trato con Patricia Cornwell para producir la serie ‘Scarpetta’, basada en sus veinticinco libros con Kay Scarpetta como personaje principal. No puedo dormir por la noche, estoy muy emocionada. Y tengo sesenta y dos años. Cumpliré sesenta y tres en noviembre".
Nuestro tiempo se acabó. Me siento exhausto, aturdido, pero Curtis se pone de pie, se pone los zapatos y se dirige hacia su ansioso cuidador. Le deseo un buen estreno. "¡Oh, que te j***n, lo odio todo!" ella ríe. “Podría hacer esto todo el día”, dice al señalar donde nos sentamos. “La parte que odio es sobre mi apariencia, lo que llevo puesto... ¡Lo odio! ¡Todas estas otras mujeres que están paradas allí, les encanta! Es la parte de esto que yo... odio".
'Halloween Kills' ya está en los cines