Sam Fender pasa la noche en un pub de Newcastle con Johnny Depp antes de que el actor ganara el juicio
El músico compartió una selfie con Depp y el músico Jeff Beck, y los llamó “verdaderos héroes”
Sam Fender pasó la noche en el pub con Johnny Depp cuando el actor ganó su juicio por difamación contra Amber Heard.
Depp había demandado a Heard por US$50 millones por insinuar supuestamente que había abusado de ella en un artículo de opinión del Washington Post de 2018. Ella persiguió una contrademanda por US$100 millones.
Mientras el jurado deliberaba esta semana, Depp viajó al Reino Unido. El miércoles (1 de junio) se llegó a un veredicto, y empezaron a surgir publicaciones en las redes sociales en las que se afirmaba que el actor había sido visto en un pub con la cantante Fender en el Quayside de Newcastle esa misma noche.
El jurado dio a conocer su veredicto, en el que se declaraba que Heard había difamado a Depp en los tres cargos.
Se le exigió una indemnización de US$10 millones por daños compensatorios y US$5 millones por daños punitivos. Heard ganó parcialmente el caso y se le concedieron US$2 en daños compensatorios, pero no en daños punitivos.
Minutos después de conocerse el veredicto, Fender compartió una foto en su Instagram Stories mientras estaba sentado en una terraza de un bar con Depp y el músico Jeff Beck, con quien Depp actuó en un escenario en el Reino Unido esta semana.
“Verdaderos héroes”, tituló el nativo de North Shields en su post.
The Independent se puso en contacto con los representantes de Fender para pedirles un comentario.
Tras el veredicto del jurado, Heard emitió un comunicado diciendo: “La decepción que siento hoy está más allá de las palabras. Tengo el corazón roto porque la montaña de pruebas aún no fue suficiente para hacer frente al poder desproporcionado, la influencia y el dominio de mi exmarido”.
“Estoy aún más decepcionada por lo que este veredicto significa para otras mujeres. Es un revés... Estoy triste por haber perdido este caso. Pero me entristece aún más que parezca que he perdido un derecho que creía tener como estadounidense: el de hablar libre y abiertamente”.