‘Good American Family’ retrata la historia de Natalia Grace, la huérfana con enanismo acusada de fingir su edad
La huérfana ucraniana con enanismo acusada de hacerse pasar por una niña e intentar matar a sus padres adoptivos dio su versión de la historia por primera vez el año pasado. Ahora es la inspiración de una serie dramática de Hulu protagonizada por Ellen Pompeo. Andrea Cavallier analiza el extraño caso
Años después de que el curioso caso de Natalia Grace cautivara a la nación, llega a Hulu una nueva serie inspirada en la extraña historia de la huérfana ucraniana con enanismo acusada de intentar matar a sus padres adoptivos y fingir ser una niña.
Good American Family, que se estrena hoy, se centra en las “inquietantes historias” en torno a una pareja del Medio Oeste que adopta a una niña con una rara forma de enanismo, según la descripción de la serie.
No se menciona directamente a Natalia ni a sus padres adoptivos, Michael y Kristine Barnett, pero la serie se inspira en “múltiples historias, perspectivas, amenazas, interpretaciones y acusaciones”.
Al igual que los Barnett, los padres de la serie —interpretados por la actriz de Grey’s Anatomy Ellen Pompeo y Mark Duplass— crían a la niña junto con sus hijos biológicos, pero empiezan a sospechar de ella con el argumento de que es mucho mayor de lo que creen y que supone una amenaza para su seguridad física.
“Mientras defienden a su familia de la hija que han llegado a creer que es una amenaza, ella libra su propia batalla para enfrentarse a su pasado y a lo que le depara su futuro, en una lucha que en última instancia se desarrolla en la prensa sensacionalista y en los tribunales”, indica la descripción de Hulu. Añade que la historia está contada desde “múltiples puntos de vista, como medio para explorar cuestiones de perspectiva, prejuicios y traumas”.
El caso llegó a las noticias nacionales en 2014 y se ha mantenido en el ojo público a lo largo de los años, ya que los padres hicieron cambiar legalmente la edad de Natalia y la dejaron sola en un apartamento.
A lo largo de los años, el caso ha sido objeto de varios programas de televisión, pódcast y documentales, entre ellos la serie documental de Investigation Discovery El curioso caso de Natalia Grace.
En la serie de ID, Natalia compartió por primera vez desgarradores detalles de su infancia, que terminó con su llegada a una nueva familia, con los padres Bishop Antwon y Cynthia Mans, una pareja religiosa que más tarde la adoptó.
Los Mans debían ser un final feliz para Natalia, quien asegura tener 21 años. Pero resultó ser todo menos eso, como se ve en El curioso caso de Natalia Grace: el capítulo final, que se emitió en Investigation Discovery y Max.
En medio del lanzamiento de la serie, Natalia también reveló el mes pasado en una inesperada entrevista con People que está viviendo con su tercera familia estadounidense y compartió nuevos detalles sobre cómo huyó del control de su última familia adoptiva a mitad de la noche.
La infancia de Natalia
Durante años, Natalia Grace fue acusada por sus padres adoptivos, Michael y Kristine Barnett, de “hacerse pasar” por una niña que, según ellos, era en realidad una “sociópata” asesina que pretendía acabar con su familia.
Los Barnett adoptaron a la huérfana ucraniana en 2010 y más tarde solicitaron a un juez que cambiara su edad legal de ocho a 22 años, tras citar “pruebas” espeluznantes que, según ellos, demostraban que era sustancialmente mayor.
Cuando adoptaron a Natalia, que padece un raro trastorno genético llamado displasia espondiloepifisaria congénita, a la pareja se le informó que ella tenía seis años.
Pero la pareja tenía dudas y más tarde citó “pruebas” que demostraban que era mayor de lo que decía ser.
Cuando Kristine intentó bañar a su nueva hija, se sorprendió al descubrir vello púbico y no pasó mucho tiempo antes de que la madre adoptiva descubriera que Natalia había estado ocultando su ciclo menstrual, según ella.
Cuando los Barnett descubrieron que otra niña con la misma forma rara de enanismo vivía también en Indiana, los padres organizaron una visita para que las dos niñas pudieran conocerse.
Michael Barnett afirma que se sorprendió de inmediato al ver que Natalia parecía mucho mayor que la otra chica, e insiste en que Natalia también se dio cuenta y rápidamente intentó verse más joven.
Durante los meses siguientes, lo que empezó como una pregunta sobre la verdadera edad de Natalia no tardó en convertirse en una vorágine de acusaciones, en la que los Barnett afirmaban que su hija adoptiva era en realidad una adulta homicida.
La madre adoptiva de Natalia, Kristine, que no pudo ser localizada por los productores de ID para la docuserie, dijo a DailyMail.com en 2019 que su familia vivió aterrorizada en los meses posteriores a que la adoptaran.
Alegó que Natalia amenazó con apuñalar a la familia mientras dormían, a ella la empujó hacia una valla eléctrica y le echó cloro en el café.
Cuando le preguntó qué estaba haciendo, Natalia respondió: “Estoy intentando envenenarte”.
En la primera temporada de la docuserie de ID, Natalia se defiende de las acusaciones que, según ella, están descaradamente tomadas de la película de suspenso La Huérfana, de 2009.
“Nunca intenté asesinar a nadie”, planteó.
En 2019, los Barnett fueron puestos bajo custodia por cargos de negligencia infantil después de que abandonaran a Natalia en un apartamento de Lafayette, Indiana, y se mudaran a Canadá.
Michael fue absuelto de los cargos en octubre de 2022, mientras que el caso de Kristine se desestimó en marzo de 2023, apenas tres semanas antes de su juicio. La pareja está divorciada desde 2013.
Natalia comparte su historia por primera vez
La historia de Natalia ha dado lugar a múltiples documentales, como la docuserie de ID El curioso caso de Natalia Grace, que se emitió en 2023.
Luego, en 2024, habló por primera vez en la docuserie de ID Natalia Speaks, en la que se enfrenta cara a cara con su padre adoptivo en una conversación impactante en la que lo interroga sobre las innumerables preguntas que ha tenido durante años.
Natalia, que afirma que perdió su infancia, también aborda algunas de las descabelladas acusaciones proferidas en su contra, entre ellas que intentó matar a su familia adoptiva.
“No se van a salir con la suya”, exclama Natalia en la docuserie. “Esta es mi versión de la historia. ¿Te parezco un monstruo?”.
En el primer episodio, se muestra que Natalia cree que las “mentiras” de los Barnett se confirman cuando por fin obtiene confirmación médica sobre su edad.
Las pruebas de ADN realizadas en TruDiagnostic utilizaron solo una muestra de sangre para determinar la “edad cronológica” de Natalia. Los resultados indicaron que en ese momento tenía una edad estimada cercana a los 22 años. El Dr. Halland Chen, quien participó en el documental, señaló que este resultado era bastante preciso en relación con la edad estimada previamente. Según él, si las pruebas la situaban en torno a los 22 años y anteriormente se calculó que tenía cerca de 20, la diferencia de dos años no era significativa.
“Sé la verdad desde que tengo uso de razón, que era una niña”, afirma Natalia, que rompe a llorar tras recibir los resultados. “Solo quiero que la gente vea la verdad sobre mi edad”.
Es bastante más joven que los 34 años que establece su fecha de nacimiento legalmente modificada de 1989. La confirmación significaba que solo tenía cuatro años cuando llegó a Estados Unidos procedente de Ucrania y apenas ocho cuando los Barnett le cambiaron legalmente la edad y se trasladaron a Canadá, para dejarla sola en un apartamento de Lafayette.
“Este trocito de papel anula por completo todas y cada una de las mentiras que han dicho los Barnett. Esto es tan grande, han sido 12 años de solo dos personas que mienten a más no poder. Arruinaron la vida de una niña”, dijo Natalia después de que le dieran los resultados.
La conversación era la primera vez en años que Natalia y su padre adoptivo, Michael Barnett, se veían cara a cara fuera de un tribunal
“¿Por qué estamos aquí, Michael?”, pregunta Natalia.
“¿Por qué estamos aquí?”, responde Michael. “Si te refieres filosóficamente...”.
“No, quiero saber ¿por qué me adoptaste en primer lugar?”, cuestiona Natalia.
Michael afirmó que él también era una víctima de su ahora exmujer Kristine, quien lo manipuló y maltrató.
“Muchas de estas preguntas no van a tener una respuesta única”, explicó.
“Esto no es fácil. Tuve el mismo monstruo que tú. Kristine. Fui excepcionalmente controlado y menospreciado y amenazado, fui minimizado, me arrancó todo lo que yo era y fui guiado e instruido para ser exactamente lo que ella quería que fuera”.
Aunque los dos parecen compartir el trauma de las circunstancias, Natalia declara más tarde que sigue creyendo que Michael es culpable, “porque se quedó de brazos cruzados y no hizo nada”.
“Si Kristine era su supuesto monstruo, podría haber luchado contra ella. Yo no podía”, dice más tarde a la cámara.
Cuando ella le pregunta si sabía de los supuestos abusos, algunos de los cuales admitió que sí conocía, Michael se muestra conmocionado y afirma que no podía hacer nada porque Kristine lo amenazó con que no volvería a ver a sus hijos.
Natalia admitió en la docuserie que, cuando vivía con los Barnett, decía a la gente que tenía 22 años, por miedo.
“Cuando Kristine me indicó que le dijera a la gente que tenía 22 años, lo hice porque estaba aterrorizada”, explicó. Además, detalló horribles experiencias, como haber sido golpeada en varias ocasiones con un cinturón y obligada a permanecer de pie contra una pared durante horas, sin poder ir al baño, lo que la llevaba a ensuciarse. “No sabía lo que ella haría”.
Natalia también hizo varias preguntas a Michael y refutó sus acusaciones anteriores sobre ella, incluyendo una supuesta ocasión en la que sostuvo un cuchillo en la mano mientras “se cernía” sobre la cama donde él y su esposa estaban durmiendo.
“Nunca estuve en la habitación de ustedes con un cuchillo”, exclama Natalia con la cabeza entre las manos.
“Sé lo que vi”, respondió.
Natalia ha negado todas las acusaciones de intenciones y compartamiento asesinos que los Barnett han expresado.
“Se suponía que debían cuidar de mí. Pero lo único que hicieron fue hacerme daño”.
La huida de Natalia
Natalia creyó encontrar la felicidad con una nueva familia adoptiva: el obispo Antwon y Cynthia Mans, una pareja que llevaba un estricto estilo de vida religioso con sus 10 hijos en Indiana y, más tarde, en Tennessee.
La pareja ha abogado por Natalia y su discapacidad, y en 2019 acudieron al programa Dr. Phil con Natalia y sostuvieron que ella nunca mostró signos de violencia hacia su familia.
Pero no fue el final feliz que Natalia había esperado.
En la nueva docuserie, se afirma que los Mans explotaban a Natalia.
Varios testigos afirman haber visto a los Mans maltratar físicamente a Natalia dándole bofetadas en la cara y azotándola con un cinturón. Cuando People le preguntó sobre las acusaciones, Natalia no confirmó ni negó los supuestos incidentes.
Pero Natalia sí compartió con el medio cómo planeó su huida de la familia, a la que acusó de controlarla y prohibirle contactar a personas externas.
Recurrió a su novio y viejos amigos Nicole y Vince DePaul para crear un plan de fuga. Los DePaul intentaron adoptar a Natalia en 2009, pero fueron rechazados, informó People.
Natalia dijo al medio que estaba nerviosa por dejar a su familia y a las “hermanas” a las que había ayudado a cuidar, pero sabía que era la decisión correcta.
Desde que Natalia abandonó a la familia Mans, vive con los amigos que la ayudaron a escapar.
Nicole y su marido Vince son gente pequeña, al igual que Natalia. La pareja dijo a People que las cosas fueron difíciles al principio porque los Mans todavía estaban involucrados, pero se han calmado las aguas.
“Llamaban a Natalia constantemente e intentaban que volviera”, explicó Nicole. “Teníamos la preocupación constante de mantener un punto medio sin ir al extremo. Ella venía de una casa gobernada por un dictador, así que no quería decirle lo que tenía que hacer”.
“Tampoco ha hecho nunca nada violento”, añadió Nicole. “Nuestros perros la adoran y duermen con ella. Soy amante de los animales. Si no confiara en ella, no dejaría a mis bebés con ella. También juzgan el carácter”.
Natalia está aprendiendo a conducir y ha estado estudiando para aprobar el examen de conocimientos GED, ya que desea ser profesora algún día. Sigue con su novio y asegura que “es una bendición estar viva”.
“Aprender todo lo que tengo sobre cómo vivir con mi enanismo ha sido una gran experiencia”, afirma. “Me encanta. Por supuesto, todavía echo de menos a mis hermanos y todo eso. Pero me encanta. Me siento libre”.
‘Good American Family’ está disponible en el servicio de ‘streaming’ Hulu en Estados Unidos. Se espera que llegue a la plataforma de Disney+ para el resto del mundo.
Traducción de Michelle Padilla