“Desfile planetario”: se producirán dos inusuales alineaciones de planetas en enero y febrero
Uno de estos dos fenómenos no se repetirá hasta dentro de unos 400 años
En enero y febrero se producirán dos alineaciones planetarias extraordinarias, una de las cuales ofrecerá a los observadores de estrellas la oportunidad de presenciar un espectáculo celeste que no se repetirá hasta dentro de 400 años.
El primero de estos fenómenos ocurrirá el viernes 17 de enero y el sábado 18 de enero, cuando seis planetas se alinearán en el cielo nocturno, en un acontecimiento que algunos astrónomos denominan “desfile planetario”.
Marte, Júpiter, Neptuno, Saturno, Urano y Venus aparecerán juntos en fila, aunque Neptuno y Urano solo serán visibles con prismáticos o telescopio.
A continuación, el 28 de febrero, siete planetas se alinearán en una configuración espectacular que no volverá a repetirse hasta el año 2492.
El mejor momento para ver el desfile planetario en enero es durante las dos primeras horas después del atardecer; Saturno y Venus aparecerán cerca el uno del otro en el suroeste, Júpiter en lo alto y Marte en el este.
El planeta rojo también alcanzará la “oposición” con respecto a la Tierra este mes, realizando su mayor aproximación a la nuestro planeta en dos años. Por lo tanto, aparecerá más grande y más brillante en el cielo nocturno, haciendo que la alineación planetaria sea aún más pronunciada.
“[Los observadores de estrellas] tendrán la oportunidad de contemplar cuatro planetas brillantes en una vista panorámica”, explicó Preston Dyches, del Laboratorio de Propulsión a Chorro de la NASA.
“Urano y Neptuno también están ahí, técnicamente. Pero no aparecen como planetas brillantes”, agregó, y continuó: Estas oportunidades de ver varios planetas no son tan inusuales, pero no ocurren todos los años, así que merece la pena aprovecharlas”.
Los astrónomos aconsejan a las personas que esperen ver estos fenómenos planetarios que se dirijan a una zona con una contaminación lumínica mínima y que dejen pasar al menos 30 minutos para que la vista se adapte a la oscuridad.
Traducción de Sara Pignatiello