Autoridades kenianas y centroafricanas luchan por contener nuevos brotes de viruela símica
Kenia y la República Centroafricana han declarado nuevos brotes de mpox, o viruela símica, mientras las autoridades sanitarias africanas toman medidas para tratar de contener la propagación de la enfermedad en una región que carece de vacunas.
Kenia anunció el brote el miércoles, tras detectarse un caso en un pasajero que viajaba de Uganda a Ruanda por un paso fronterizo en el sur de Kenia. La República Centroafricana fue la primera en declarar un nuevo brote el lunes, diciendo que se estaba extendiendo a su capital, Bangui.
La viruela símica es causada por un virus que se origina en animales silvestres y ocasionalmente salta a las personas, que pueden contagiarlo a otras.
“Estamos muy preocupados por los casos de viruela símica que está asolando la región 7 del país”, declaró el lunes el ministro de Salud Pública de la República Centroafricana, Pierre Somsé.
La viruela símica se convirtió en motivo de preocupación mundial durante un brote internacional en 2022 en el que la enfermedad se extendió a más de 100 países, y ha sido endémica en partes de África central y occidental durante décadas.
La Organización Mundial de la Salud dijo en noviembre que había confirmado la transmisión sexual de la viruela símica en la República Democrática del Congo por primera vez. Los científicos africanos advirtieron que esto podría dificultar la contención de la enfermedad.
Aunque las epidemias de viruela símica en Occidente se contuvieron con la ayuda de vacunas y tratamientos, apenas se dispone de dichos recursos en algunas partes de África, donde varios países han notificado brotes en los últimos meses.
El más afectado del continente es la República Democrática del Congo, que ha registrado más de 12.000 casos y al menos 470 muertes este año en su mayor brote. Sudáfrica, que registró por última vez un caso de viruela símica en 2022, también ha notificado un brote este año.
En la República Centroafricana, donde la infección es más común en zonas remotas, las autoridades pidieron el apoyo de la población para contribuir a los esfuerzos que está realizando el gobierno para frenar la propagación de la enfermedad.
La Comunidad Africana Oriental (CAO) también ha emitido un comunicado en el que alerta a los Estados miembros sobre la enfermedad en la República Democrática del Congo, que colinda con cinco países de la región. Uno de ellos, Burundi, ya ha confirmado tres casos.
Andrea Aguer Ariik Malueth, subsecretario general del bloque, instó el lunes a los Estados que integran la CAO a “proporcionar la información necesaria sobre la enfermedad y tomar medidas preventivas”.