Familia de mujer que murió semanas después de dar a luz comparte síntomas de trombosis a tener en cuenta

Una mujer murió trágicamente cinco semanas después del nacimiento de su hija menor, cuando repentinamente colapsó en su casa después de sufrir una trombosis “prevenible”, dejando a la familia solo con una imagen de todos juntos y pidiendo una mayor conciencia sobre los riesgos posteriores al embarazo.

La asistente de enfermería de salud mental, recordada como una mujer “divertida y cariñosa”, de 32 años, estaba feliz tras el nacimiento de su hija, Betty Crosbie, quien llegó al mundo el 9 de febrero de 2020, después de un largo embarazo en el que sufrió dolor pélvico, o sea que tenía dificultades para moverse.

Samantha solo logró tomarse una foto con sus tres hijos, antes de que su vida fuera cruelmente truncada el 16 de marzo de ese año, después de solo cinco preciadas semanas como una familia de cinco miembros.

La mujer colapsó repentinamente en su casa, ubicada en Red Hill, Surrey, mientras su esposo, el andamiero Paul Crosbie, de 38 años, y sus hijos mayores, Stanley, entonces de cinco años, y Evelyn, entonces de nueve, estaban en el cine.

Cuando perdió el conocimiento, Samantha estaba hablando por teléfono con su madre, Jane Parker, de 62 años, quien comenzó a gritar frenéticamente el nombre de su hija y luego llamó a una ambulancia, que la llevó de urgencia al hospital.

Samantha murió al día siguiente, después de que los análisis revelaran que había sufrido una embolia pulmonar (EP), un vaso sanguíneo bloqueado en los pulmones y el corazón que ocurre cuando un coágulo de sangre, generalmente de las venas de las piernas, se rompe y viaja a los pulmones. Aunque es raro, este es un mayor riesgo para las mujeres embarazadas.

Aunque todavía está devastada por su pérdida, la madre de Samantha, Jane, que vive en Walton-on-the-Hill, Surrey, espera que la experiencia de su hija pueda ayudar a educar a otras mujeres: “Si Samantha hubiera sido más consciente de los riesgos, podría estar aquí todavía hoy.

“Quiero que sus hijos sepan que hicimos todo lo posible para ayudar a marcar la diferencia.

“Quiero que sepan que su vida no fue en vano”.

Por encima de todo, comentó Jane, Samantha siempre quiso tener hijos.

“Ser madre fue su ambición de toda la vida”, contó Jane. “Ella los amaba e hizo todo con ellos.

“Siempre jugaban a los disfraces: los disfrazaba de prisioneros o de Los Simpson para divertirse en casa o decoraba la carriola como un abejorro para una competencia en uno de los festivales del pueblo.

“Siempre tenía ideas divertidas e inteligentes que les encantaban [a sus hijos]”.

Fue a principios de 2019 cuando Samantha y Paul se enteraron de que esperaban otro bebé, Betty, que nacería en febrero de 2020.

Si bien la pareja estaba encantada, Samantha tuvo dificultades durante el embarazo, especialmente con el dolor de cintura pélvica, que puede causar dolor al caminar, subir escaleras y darse vuelta en la cama.

Jane relató: “Tuvo dolor en la cintura con sus otros embarazos, pero con este, sucedió de inmediato y le resultaba muy difícil moverse.

“El dolor se volvió tan intenso que terminó pasando en casa la mayor parte del tiempo”.

El 9 de febrero nació la pequeña Betty y la familia estaba encantada.

“Samantha estaba muy feliz, no solo tenía a su bebé, sino que el dolor de cadera también había desaparecido”.

Después de superar una infección del oído poco después de dar a luz, Samantha parecía estar volviendo a su rutina.

Pero apenas cinco semanas después de dar a luz, Samantha colapsó repentinamente.

“Llamé a Samantha por la mañana mientras estaba en el centro comercial con Betty, buscando lo que ahora sé que era mi regalo del Día de la Madre”, recuerda Jane.

“Estaba diciendo que la rueda de su carriola estaba atascada y luego que no podía encontrar su boleto de estacionamiento”.

Poco después de que Samantha llegara a casa, se hizo evidente que algo andaba muy mal.

“Todavía estaba hablando por teléfono con ella diciéndole que iríamos más tarde para arreglar la carriola y luego, de repente, comenzó a actuar raro, diciendo tonterías, y luego se quedó en silencio.

“La llamaba y la llamaba y me dijo: ‘Creo que me desmayé’, pero luego se quedó callada de nuevo”.

Gritando desesperadamente el nombre de Samantha, Jane llamó a una ambulancia mientras intentaba localizar a Paul, que estaba en el cine con sus otros dos hijos.

Samantha fue llevada de urgencia al hospital, y los escáneres revelaron que Samantha había sufrido una trombosis masiva en los pulmones y el corazón.

Durante las siguientes 24 horas, los médicos intentaron hacer todo lo posible para salvar a Samantha, pero trágicamente, no pudieron hacer nada.

“Fue devastador”, lamentó Jane.

“Todo cambió ese día. Me rompió el corazón”.

Después de dos dolorosos años de pandemia, el 16 de julio de este año, Jane quiso hacer algo en memoria de Samantha y organizó un festival conmemorativo en un pueblo de Walton-on-the-Hill, en el que estuvieron Evelyn, ahora de 12 años, Stanley, ahora de siete y Betty, de dos años.

“Quería tener un día divertido para celebrar su vida y no solo concentrarme en los dos años anteriores”, señaló.

“Todos tenían pulseras con el nombre de Samantha y los niños soltaron globos en su honor, y todos tenían una lata de Coca-Cola dietética, que era su bebida favorita.

"Pusimos diez minutos a las Spice Girls, que a ella le encantaban, y también escuchamos un audio de Samantha riéndose por las bocinas, lo cual fue realmente emotivo”.

Pero Jane también espera mantener viva la memoria de Samantha creando conciencia sobre las trombosis a través de la organización benéfica Thrombosis UK.

“Hoy en día, no tienes la misma partera todo el tiempo, tienes muchas diferentes, por lo que es posible que no sepan todo lo que sucede.

“Samantha no pudo moverse durante nueve meses, no hacer mucho, fue una señal que podría haberse destacado.

“Si hubiera entendido que correría más riesgo de tener una trombosis, estoy seguro de que habría hecho una diferencia.

“Desde el momento en que una mujer se embaraza hasta el final, debemos hablar constantemente sobre estas cosas y asegurarnos de que las mujeres las conozcan y estén al tanto, porque podría salvar una vida”.

Paul, que ahora vive con sus tres hijos, su nueva prometida y sus dos hijos en Purley, Surrey, también espera que la historia de Samantha ayude a otras mujeres.

“Toda nuestra vida cambió en el momento en que Sam murió”, admitió.

“Me rompe el corazón saber que Betty no va a conocer a su madre.

“Sam era única. Era una persona tan divertida y despreocupada, que siempre nos puso a nosotros y a los niños primero.

“La familia significaba todo para ella.

“No podemos cambiar lo que sucedió, pero si podemos hacer que las personas se den cuenta o sepan qué observar y salvar a una persona, entonces ayudaremos a salvar vidas”.

Jane Dickson, jefa de enfermería y obstetricia en Surrey and Sussex Healthcare NHS Trust, comentó: “Extiendo mis más sinceras condolencias a la familia de Samantha. Crear conciencia sobre los riesgos de la embolia pulmonar es una parte importante de la atención durante el embarazo.

“En la fundación, brindamos folletos de información detallada a los pacientes, documentamos las evaluaciones de riesgo en sus notas y, cuando corresponde, compartimos una guía en video para administrar medicamentos después de que dejamos de atenderlos”.

La profesora Beverley Hunt, una de las principales expertas en trombosis y trastornos hemorrágicos adquiridos, dijo: “La embolia pulmonar (EP) se produce cuando se desprende un coágulo de sangre, generalmente de las venas de las piernas, también conocido como trombosis venosa profunda (TVP), y viaja a los pulmones.

“Las mujeres embarazadas corren un mayor riesgo de PE y, aunque es raro, es una de las principales causas de muerte en el embarazo y el posparto”.

“Esto se debe a que durante el embarazo, la sangre de una mujer se vuelve más espesa, posiblemente para disminuir la pérdida de sangre durante el parto. Esta viscosidad continúa después del parto y desaparece alrededor de las seis semanas después de dar a luz”, explicó.

“Las mujeres embarazadas también experimentan menos flujo de sangre en las venas de las piernas porque los vasos sanguíneos alrededor de la pelvis están presionados por el útero en crecimiento y las venas se agrandan durante el embarazo. También sabemos que la inmovilidad es un factor de riesgo importante para los coágulos.

“Si se usa la prevención con pequeñas dosis de heparina en mujeres con alto riesgo, entonces se puede reducir el riesgo de que se formen coágulos de sangre, por lo que la educación y la evaluación precisa del riesgo pueden resultar en beneficios sustanciales.

“Trágicamente para Samantha, este no fue el caso. Si bien es posible que esto no se clasifique como una complicación “común” del embarazo, casos como el de Samantha resaltan la necesidad de educar a las mujeres embarazadas o que acaban de dar a luz sobre el riesgo de coagulación de la sangre”.

Busca ayuda de inmediato si experimentas alguno de estos síntomas.

Llama a tu médico, partera o al 111 inmediatamente si tienes alguno de estos síntomas.

Llama al 999 de inmediato si tienes dificultad repentina para respirar, sientes dolor u opresión en el pecho o en la parte superior de la espalda o estás tosiendo sangre.

Para obtener más información sobre la trombosis, visita: www.worldthrombosisday.org/