Bolivia pone en marcha primera planta industrial de litio
En su mayor apuesta al litio y las energías renovables el presidente boliviano Luis Arce inauguró el viernes la primera planta industrial de carbonato de litio con financiamiento estatal y capacidad para producir hasta de 15.000 toneladas al año a partir de 2025.
“Estamos entrando en la era de la industrialización del litio”, dijo Arce en la ceremonia ante cientos de pobladores de esta pobre región del suroeste boliviano.
Esta es la primera planta tras una década de frustrados intentos por incursionar en el mercado mundial de este metal que han rezagado a Bolivia frente a sus vecinos Chile y Argentina, con los que conforma el llamado “triángulo del litio”. Los tres países poseen el 58% de las reservas mundiales, según el Servicio Geológico de Estados Unidos.
En lo que va del año la estatal Yacimientos de Litio Bolivianos (YLB) ha firmado convenios con la china Contemporary Amperex Technology y la rusa Uranium One Group (UOG), subsidiaria de la gigante Rosatom, para la futura construcción de otras dos plantas de mayor capacidad para producir carbonato de litio en los salares del sur boliviano.
Arce dijo que YLB competirá con las dos transnacionales y deberá desarrollar una tecnología propia. “Es la punta de lanza esta planta, después debemos desarrollar otras industrias relacionadas", acotó.
La apuesta de Arce es producir y exportar en dos años hasta 50.000 toneladas de carbonato de litio y convertir al país en un importante proveedor en momentos en que el mundo busca sustituir los combustibles fósiles para reducir el impacto del cambio climático.
La planta está emplazada a orillas del Salar de Uyuni, el desierto salado más grande del mundo, casi del tamaño de Puerto Rico. Llevó cuatro años de construcción con un costo de 94 millones de dólares y tuvo que ser rediseñada. “Tal como estaba la ingeniería, la planta no iba a arrancar nunca”, reconoció el ministro de Hidrocarburos y Energías, Franklin Molina.
El Estado boliviano será socio y “participará en toda la cadena productiva. Ese es nuestro modelo de negocios. Queremos tener soberanía en la industrialización del litio”, dijo Arce el miércoles cuando asistió a la firma con Uranium One Group.
Bolivia apuesta a la extracción directa del litio debido a la humedad de sus salares, explicó el viceministro de Exploración, Raúl Mayta.
En 2011 el expresidente Evo Morales había lanzado un ambicioso proyecto para producir baterías de litio con técnica boliviana. Su gobierno invirtió más de 900 millones dólares pero el plan no prosperó. Ahora el gobierno apunta a convertir al país en un importante proveedor mundial no de baterías sino de carbonato de litio.
“El camino recorrido para iniciar la explotación del litio fue y es azaroso. Marchas y contramarchas y ausencia total de transparencia”, dijo en un reciente estudio el analista y profesor universitario Mario Napoleón Pacheco.