Gobierno argentino se disculpa por gestión económica, prepara medidas tras fallida elección
El gobierno de Alberto Fernández pidió perdón a los votantes que le dieron la espalda en las primarias del último domingo en Argentina por la mala gestión económica y adelantó que trabaja en un paquete de medidas para paliar el impacto de la devaluación del peso en la inflación, luego de que por primera vez en su historia el peronismo quedó tercero en una elección.
“Seguramente muchos sentirán que hay lago específico en sus vidas que el gobierno ha hecho y no les permite ir hacia el futuro que ellos quieren”, reflexionó la portavoz de la presidencia, Gabriela Cerruti, el jueves en rueda de prensa. “A ellos les pedimos particularmente perdón por no haber logrado llegar a ese lugar de sus vidas en el que no se sienten representados por las políticas del gobierno”.
Con el ministro de Economía, Sergio Massa, como precandidato, el peronismo y sus aliados -bajo la denominación Unión por la Patria- alcanzó el 27% de los votos en las primarias abiertas, simultáneas y obligatorias del domingo en las que se que definieron los candidatos para las elecciones generales del 22 de octubre.
El ultraderechista Javier Milei, de La Libertad Avanza, fue el más votado con 30%, en su mayoría por argentinos desencantados con la clase política tradicional por su incapacidad para controlar la inflación y la inseguridad. En tanto, la coalición conservadora Juntos por el Cambio, que consagró a la exministra de Seguridad, Patricia Bullrich, como su candidata, fue la segunda fuerza con 28%.
“Seguramente hay muchas cosas que se hicieron mal y que todavía estamos a tiempo de cambiar”, reflexionó Cerruti.
Para que un candidato gane en primera vuelta debe obtener el 45% de los votos o al menos 40% y tener una diferencia de 10 o más puntos porcentuales sobre el segundo más votado. De no alcanzar esas cifras, los dos aspirantes más votados irán a un balotaje el 19 de noviembre.
La sorpresa por el triunfo de Milei y la incertidumbre por el resultado de octubre generó pánico en los mercados que apostaban por aspirantes más moderados. El gobierno devaluó el lunes la moneda alrededor de 20% y llevó la tasa de interés al 118% anual, además de reforzar los controles de cambio.
A su vez, el dólar en el mercado informal -al que acuden los ahorristas por las limitaciones del gobierno para adquirir divisas- cotizaba el jueves a 760 pesos por unidad respecto de los 605 del viernes previo a la elección.
La escalada de precios fue inmediata y los analistas vaticinan que la inflación podría llegar a los dos dígitos en agosto tras el 6,3% de julio. El costo de vida acumuló una variación de 60,2% en los primeros siete meses del año y en la comparación interanual el incremento alcanzó el 113,4%, una de las tasas más altas del mundo.
Más inflación también impactará en los niveles de pobreza, que ronda el 40%.
Cerruti respondió con un enfático “no” cuando la consultaron si el presidente Fernández, que no buscó la reelección, evaluaba adelantar la entrega del poder, prevista para el 10 de diciembre, ante la complejidad del escenario económico.
“Tenemos que trabajar mucho y duro de acá a octubre para poder ser capaces de representar a los que quieren un país diferente”, indicó la funcionaria.
La portavoz descartó una nueva devaluación y confirmó que el gobierno prepara un paquete de medidas que anunciará en breve “para que esa corrección del precio del dólar no influya en los precios”. Sin dar detalles, adelantó que se lanzará un nuevo acuerdo de precios de alimentos, bebidas y productos de limpieza, entre otros. Las empresas que adhieran tendrán beneficios impositivos.
También el gobierno está trabajando en “alivios” monetarios o sumas fijas para trabajadores formales e informales, jubilados y beneficiarios de planes sociales para paliar la pérdida de poder adquisitivo. No se reveló el monto.