La disputa entre Arce y Morales se traslada a aniversario dividido en partido oficialista boliviano
El partido oficialista boliviano celebró el jueves los 29 años de su fundación solo con una parte de sus integrantes, los partidarios de Luis Arce, ante la disputa interna por el liderazgo que arrastran desde hace meses el presidente de Bolivia y su antecesor Evo Morales.
La celebración por el aniversario del Movimiento al Socialismo fue convocada por los seguidores de Arce, con un acto masivo que cerró las vías en el centro de la ciudad de La Paz. Para el sábado, hay prevista otra convocatoria en la región oriental de Santa Cruz, organizada por las dirigencias afines a Morales, líder histórico del partido.
El partido de gobierno “no es de un sujeto solo… Es del pueblo boliviano y aquí estamos”, defendió Arce en su intervención por los 29 años de la fundación del MAS.
En paralelo, Isidro Auca, dirigente cocalero en el centro de Bolivia, leal a Morales, acusó de traidor y de dividir al partido al presidente de Bolivia. “Rechazamos este tipo de convocatorias que no respetan la dirigencia verdadera del MAS y nuestro único líder es Evo Morales”.
Las disputas internas entre Arce y Morales se profundizaron con el anuncio del exmandatario de querer presentarse como candidato para las elecciones de 2025. Arce no ha oficializado su postulación, pero expertos apuntan que ya está promocionándose.
El año pasado se celebró una convención del partido, en donde las bases afines a Morales lo posicionaron como su apuesta presidencial para 2025. Pero los partidarios de Arce, que rechazaron aquella convocatoria, la impugnaron ante la justicia para deslegitimar la nominación de Morales como dirigente del MAS.
El que sea designado como líder del partido tiene una mayor posibilidad de convertirse en el candidato oficialista para las próximas elecciones.
No obstante, el Tribunal Constitucional emitió una resolución a finales de 2023 que anula la relección como derecho humano, en la cual se apoyaba Morales para volver a postularse.
Arce aprovechó el aniversario del jueves para hacer un llamado a que se organice una nueva convención del MAS en mayo, convocada por el bloque que lo apoya, y distinta a la celebrada y anulada el año pasado a favor de Morales.
El Tribunal Supremo Electoral es el encargado de decidir si reconoce o no a la dirigencia elegida entonces y valore si se cumplieron los requisitos.
A sus 29 años el Movimiento al Socialismo ha estado en el poder por 17 años y su futuro es incierto. “Es un MAS bicéfalo, con una disputa nociva, tóxica, donde puede suceder todo”, señaló a radio Panamericana, Franklin Pareja, analista político y profesor en la Universidad Mayor de San Andrés.
Pareja señaló que la disputa se da tras el agotamiento de esta fuerza política. “Evo Morales llega desgastado pero que sea candidato con el MAS es otra cosa, mientras Arce no es un buen líder pero que vaya por el MAS, es otra cosa”.
Morales renunció en 2019 tras unas elecciones fallidas que desataron una convulsión política social. En el conflicto fallecieron 37 personas.
El partido de gobierno tiene hasta mayo para dar a conocer la dirigencia de la fuerza política.