Maduro firma emergencia económica para "defender la economía" de Venezuela de los aranceles de Trump

El presidente venezolano, Nicolás Maduro, firmó el martes un decreto de emergencia económica que le otorga facultades para dictar leyes con el propósito de contrarrestar los efectos de los aranceles anunciados por el gobierno del estadounidense Donald Trump.
"El decreto me faculta por dos meses a obrar, actuar y accionar distintas modalidades de políticas públicas para defender la economía nacional”, dijo Maduro en un acto de gobierno televisado.
A finales de marzo, Trump anunció que impondrá un arancel del 25% sobre todas las importaciones de cualquier país que compre petróleo o gas de Venezuela, además de imponer nuevos gravámenes a este país. Recientemente, el presidente estadounidense también anunció la imposición de aranceles de 15% a Venezuela.
Maduro advirtió que esas medidas arancelarias generan “un gran riesgo de recesión mundial con el correspondiente desplome de la economía mundial”.
El gobernante destacó que el decreto de emergencia le permitirá “dictar todas las medidas que considere necesarias para garantizar el desarrollo y crecimiento” de la economía venezolana, pese al “impacto de la guerra comercial y económica”, según él, desencadenada por Trump al aplicar un arancel base mundial de 10% y tasas arancelarias mayores para decenas de países que tienen superávits comerciales con Estados Unidos.
El decreto requiere la aprobación de la unicameral Asamblea Nacional, de abrumadora mayoría oficialista, y el aval del tribunal Supremo, controlado por los aliados del gobierno, por lo que se da por descontada su entrada en vigor.
La medida —prorrogable por 60 días más— también apunta a enfrentar los embates de las nuevas sanciones estadounidenses impuestas a Venezuela, indicó el mandatario.
Maduro no dio detalles de las leyes que dictará, aunque adelantó que el decreto permite establecer “mecanismos y porcentaje de compra obligatoria de la producción nacional para favorecer la sustitución de importaciones”.
También contempla “suspender con carácter general la aplicación y cobro de tributos nacionales, estatales y municipales", a fin de proteger el aparato productivo nacional.
Independientemente de las medidas arancelarias de Trump, la economía del país no está en un buen momento.
Luego de experimentar cierta estabilidad entre 2021 y 2023 tras una significativa hiperinflación, desde octubre pasado acusa un declive.
El tipo de cambio oficial, que se mantuvo artificialmente en aproximadamente 36 bolívares por dólar —en buena medida gracias a las inyecciones de divisas del Banco Central de Venezuela (BCV)—, a partir del 24 de octubre pasado casi se duplicó debido al incremento en el gasto público, que se canalizó hacia el mercado cambiario.
El resultado fue una depreciación acelerada del bolívar y el alza del tipo de cambio oficial y el mercado paralelo. La reciente suspensión de la licencia que permitía al gigante energético Chevron operar en Venezuela tuvo un impacto directo en la oferta de divisas, según dijo a la AP el economista Pedro Palma, director de la firma Ecoanálitica.
En los últimos años, Chevron se convirtió en un salvavidas financiero para el gobierno de Maduro.
A la par, los precios —que se fijan tomando como referencia su valor en dólares— se han incrementado drásticamente. El BCV no publica cifras de inflación desde octubre de 2024.
El Observatorio Venezolano de Finanzas, un centro de análisis independiente, estima que la inflación acumulada en el primer trimestre del año se ubicó en 36,1 %, mientras que la variación interanual alcanzó el 136%.