“No somos cómplices de criminales”; fabricantes de armas de EE.UU. responden a Gobierno de México
Luego de que el Gobierno de México aseverara que las armerías estadounidenses son “cómplices de la delincuencia”, estas respondieron asegurando que algunas de las corporaciones saben que sus armas pueden ser “mal utilizadas para cometer crímenes” y eso no las hace partícipes de actividades ilegales.
Un recurso legal interpuesto ante una corte de Massachusetts reveló que las empresas fabricantes de armas de EE.UU. conforman una cadena de tráfico ilícito de sus productos hacia México, ya que tienen la capacidad de rastrear los artefactos, y pese a ello, no cambian sus políticas de comercialización.
La demanda fue realizada por el Gobierno de México, encabezado por el presidente Andrés Manuel López Obrador, y detalló que al menos ocho firmas de armas –entre ellas filiales de Smith & Wesson, Barrett Firearms, Colt’s Manufacturing Company, Glock Incm, Sturm, Ruger & Company y otras empresas– han “facilitado” que los grupos de la delincuencia organizada del país usen empresas fachada, prestanombres y realicen operaciones trianguladas para simular compras lícitas de armas.
El contenido de la demanda fue revelado por el diario El Universal y dice: “Al diseñar, distribuir, vender y comercializar productos altamente peligrosos, los acusados asumieron el deber de garantizar que sus armas se vendan de manera legal y cuidadosa, en su totalidad, en cumplimiento de las leyes aplicables y no eludir esas leyes a través de sus prácticas comerciales”.
Y añade: “Parte del deber que asumieron los demandados fue vender y distribuir cuidadosamente sus armas. Este deber se viola cuando venden armas sin estándares, condiciones o monitoreo, a través de comerciantes y distribuidores intermedios, algunos de los cuales, los demandados saben que venden armas de manera imprudente o ilegal”.
En respuesta a la controversia, las armerías de EE.UU. aseguraron que como cualquier fabricante de cualquier producto, puede usarse “incidentalmente” en la comisión de un delito y eso no las hace partícipes de actividades ilegales, por lo que “no están involucrados activamente en esos crímenes”, revelaron.
Y agregaron: “Las compañías no son cómplices criminales porque, presuntamente, ‘saben’ que un porcentaje de sus productos serán utilizados para fines ilícitos en algún punto de la cadena de distribución”.
Y es que, según datos de la Sedena (Secretaría de la Defensa Nacional) de México, cada año ingresan al país más de 200.000 armas de fuego de todo tipo. Esto significa 567 al día, cerca de 22 cada hora. La Sedena reveló que el 70 por ciento de este armamento proviene de EE.UU.
La demanda del Gobierno de México asegura que las compañías producen cerca del 68 por ciento de las armas, lo que podría significar la venta anual de más de 340.000 unidades que van desde las plantas de armas en Massachusetts a la frontera sur entre EE.UU. y México.