Panamá vota en elecciones en las que sustituto de expresidente Martinelli llega como favorito
Los panameños acuden a las urnas el domingo para escoger al nuevo presidente por los próximos cinco años en unas elecciones dominadas por la inhabilitación del expresidente Ricardo Martinelli y cuyo sustituto en la boleta llega como el favorito en las encuestas.
Las casillas en las más de 7.574 mesas de votación en todo el país abrirán entre las 7 (1200 GMT) y las 16 (2100 GMT).
Este ha sido uno de los procesos electorales más intrincados en la historia reciente de la nación centroamericana y el candidato que resulte ganador tendrá que lidiar con los grandes desafíos de la migración por el Tapón del Darién, la crisis del agua en el Canal de Panamá y dificultades económicas.
La carrera presidencial permaneció en aguas inciertas hasta el viernes por la mañana mientras la Corte Suprema sopesaba si se debía permitir que corriera el candidato José Raúl Mulino, quien reemplazó en la nómina de los partidos Realizando Metas y Alianza al exmandatario Martinelli luego de que se confirmara una condena de más de 10 años de cárcel en su contra por blanqueo de capitales.
El alto tribunal dictaminó el viernes que Mulino era elegible, a pesar de las acusaciones de que su candidatura no era legítima porque no fue elegido en una primaria y que se presentaba sin acompañante en la boleta.
Aunque quedó fuera de la boleta, Martinelli llegó a dominar gran parte del proceso, haciendo campaña a favor de su excompañero de fórmula desde adentro de la embajada de Nicaragua, donde se refugió en febrero después de recibir asilo político.
Si bien le falta el carisma y la popularidad de Martinelli, Mulino ha aprovechado de su conexión con el expresidente. Rara vez se lo ve sin su gorra azul “Martinelli Mulino 2024” y ha prometido ayudar a Martinelli si es elegido.
“Todo el mundo decía si (Martinelli) corre, gana", dijo en entrevista con The Associated Press Ragnhild Melzi, vicepresidenta de Programas Públicos y Relaciones Corporativas de Americas Society/Council of the Americas en Nueva York. “Mulino es el sucesor y creo que se beneficia de lo que tenía Martinelli, de lo positivo que una parte muy grande del pueblo panameño le veía. El dinamismo que hubo”.
Detrás de Mulino en las encuestas de intención de voto están el expresidente Martín Torrijos (2004-2009) y los candidatos Ricardo Lombana y Rómulo Roux, quienes vuelven a presentarse en una elección después de haber terminado detrás del ganador de los comicios de 2019, el presidente saliente Laurentino Cortizo.
Mulino también ha prometido marcar el comienzo de una economía próspera como la que se vio durante el gobierno de Martinelli (2009-2014) y detener la migración a través del Tapón del Darién, las peligrosas selvas que unen Colombia y Panamá y que fueron atravesadas por medio millón de migrantes el año pasado.
Su mensaje resonó en muchos votantes cansados de la clase política del país, donde se escenificaron protestas masivas el año pasado contra un contrato gubernamental con una mina de cobre que, según dijeron, ponía en peligro el medio ambiente y el agua en un momento en que la sequía se había vuelto tan grave que restringió el tránsito comercial a través del Canal de Panamá.
“La elección de Panamá será una de las más complejas de su historia moderna. La votación está marcada por una mayor fragmentación política y descontento social bajo el presidente saliente Laurentino Cortizo”, indicó Arantza Alonso, analista senior para América de la firma de consultoría estratégica y riesgo Verisk Maplecroft con sede en Bath, Inglaterra.
En un análisis enviado a AP, Alonso refirió que una encuesta de principios de abril mostró que casi una cuarta parte (23%) de los ciudadanos estaban indecisos o poco inclinados hacia alguno de los aspirantes, lo que indica “los bajos niveles de satisfacción de los panameños con los candidatos ofrecidos”.