Participantes del desfile del Orgullo Gay en Sao Paulo reivindican los símbolos nacionales de Brasil
El icónico verde y amarillo de la bandera de Brasil se mezcló el domingo con un mar de tutús decorados con los colores del arcoíris, abanicos y peinados de drag queen en el desfile del orgullo LGBTQ+ en Sao Paulo.
El evento anual a lo largo de la principal vía pública de Sao esta ciudad es uno de los festejos del orgullo gay más grandes del mundo, al cual asisten miles de personas para celebrar la diversidad sexual en un país que es sinónimo de fiestas callejeras, pero donde en años recientes han aumentado la violencia y la discriminación contra miembros de la comunidad LGTBQ+.
Aunque el tipo de vestimenta es opcional en gran medida, este año los organizadores hicieron una petición especial para que los participantes vistieran de verde y amarillo, en un incisivo reproche a los seguidores de extrema derecha del expresidente Jair Bolsonaro, quienes en épocas recientes se adjudicaron los colores de los símbolos nacionales de Brasil.
“Marcharemos esta tarde para recuperar nuestra bandera y mostrar que Brasil estará mejor, será homosexual, lesbiana, travesti”, dijo Erika Hilton, quien en 2022 se convirtió en una de las dos personas abiertamente transgénero en ser elegidas para el Congreso de Brasil, frente a una multitud que la vitoreaba.
Aunque Brasil fue pionero de los derechos LGBTQ+ en América Latina —la transfobia se convirtió en delito en 2019—, el país todavía tiene el mayor número de personas trans y gay asesinadas en el mundo.
En 2023, en Brasil se cometieron el 31% de los 321 homicidios de personas trans y de género diverso reportados a nivel mundial, según Transgender Europe, un organismo que recopila datos a nivel mundial. Ha sido el 16o año consecutivo que el país encabeza la lista.