Un soldado muerto y dos uniformados heridos dejan combates y explosivos al noroeste de Colombia
Un soldado murió el jueves y dos uniformados más resultaron heridos en enfrentamientos con grupos ilegales y la detonación de explosivos en el noroeste de Colombia, donde en las últimas semanas se ha agudizado la violencia por enfrentamientos entre grupos armados, informaron las autoridades.
El soldado Nader Alarcón falleció durante combates en Tibú, ubicado en la región de Catatumbo, con una disidencia de las extintas Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) que no se acogieron al acuerdo de paz de 2016. En tanto, otro soldado resultó herido por la activación de un artefacto explosivo.
En las últimas semanas la región de Catatumbo ha vivido una ola de violencia que ha dejado más de 60 personas muertas y 50.000 desplazados por enfrentamientos entre la guerrilla Ejército de Liberación Nacional (ELN) y la disidencia de las FARC.
Desde enero está vigente el “estado de conmoción interior”, una figura que da facultades extraordinarias legislativas y la posibilidad de restringir algunos derechos, tanto en el Catatumbo como en el área metropolitana de Cúcuta y las fuerzas militares han incrementado su presencia en la zona para intentar restablecer el control.
En paralelo fue herido un policía en la ciudad de Cúcuta, fronteriza con Venezuela, por la detonación de un explosivo que fue lanzado contra un puesto policial en la madrugada. El agente recibió el impacto de esquirlas y está bajo pronóstico reservado porque una de ellas podría comprometer su vida, dijo a la prensa el comandante de la Policía Metropolitana de Cúcuta, brigadier general William Quintero.
Otras cinco explosiones se registraron durante la noche del miércoles y la mañana del jueves en Cúcuta.
Las detonaciones iniciaron cerca de la medianoche cuando fue atacado con explosivos y armas de largo alcance otro puesto de policía que fue “derribado”, según el reporte policial. Poco después fue atacado con explosivos un peaje cercano dejando daños en su infraestructura.
En las instalaciones de otro puesto de policía, ubicado a 300 metros del puente internacional que comunica con Venezuela, fueron instaladas cuatro cargas explosivas. Tras acudir al lugar en la madrugada las autoridades hallaron otros dos explosivos sin detonar.
Las autoridades investigan quiénes son los presuntos autores de los ataques y ofrecieron una recompensa de hasta 24.400 dólares por información que conduzca a los atacantes.
Sin embargo, el comandante de la policía dijo a la prensa que éstos ataques coinciden con fechas que conmemora la guerrilla el ELN.
“Hay una escalada de terrorista, no sólo por los hechos de anoche y esta madrugada, estos días hubo ubicación de banderas y explosivos tanto en la vía Puerto Santander, son las fechas conmemorativas del ELN, la muerte de Camilo Torres”, un cura que formó parte de la insurgencia, explicó Quintero.
Las autoridades indicaron que están reforzando las medidas de seguridad, especialmente en los puentes internacionales que comunican con Venezuela, mientras el alcalde de Cúcuta, Jorge Acevedo, impuso un toque de queda hasta la mañana del viernes para “garantizar la tranquilidad".
"No vamos a permitir que los violentos nos superen", agregó Acevedo. Durante el viernes se suspenderán las actividades escolares en la ciudad.
En medio de la ola de violencia esta semana renunció el ministro de Defensa, Iván Velásquez, y en su reemplazo fue designado la víspera el general Pedro Sánchez, quien el jueves anunció que radicó la solicitud de retiro del servicio activo para asumir el cargo como civil.
En Colombia desde 1991 es tradición que sean civiles quienes asuman como ministros de Defensa, con excepción de algunos encargos temporales. El último de ellos fue un general que asumió en 2009.