Bomberos en Canadá libran batalla épica para proteger a comunidades de incendios
Los bomberos trataban de luchar el sábado contra las llamas, que ardían en un poblado de Columbia Británica en Canadá y obligaron a evacuar una dependencia de la Universidad de Columbia Británica.
El fuego en poblado de West Kelowna obligó a las autoridades a declarar un estado de emergencia allí.
Entretanto la capital de los Territorios Noroccidentales de Canadá se convirtió prácticamente en un pueblo fantasma luego que casi todos sus 20.000 habitantes abandonaron la ciudad, huyendo de uno de los cientos de incendios que arden en Canadá.
La Columbia Británica estaba bajo estado de emergencia mientras los bomberos libraban una batalla épica. El jefe de bomberos de West Kelowna, Jason Brolund, declaró en conferencia de prensa que el incendio “es exponencialmente peor de lo que esperábamos”.
“Luchamos contra 100 años de incendios en una sola noche”, expresó Brolund el viernes, antes de otra noche de combate contra las llamas. No se reportaron muertes, pero dijo que “una cantidad significativa” de estructuras quedaron destrozadas.
Los bomberos en Yellowknife, la capital de los Territorios Noroccidentales, temen que el incendio llegue a la ciudad este fin de semana si no llueve. Se pronosticaban cielos despejados en la provincia para el sábado.
Las autoridades dijeron el viernes en la tarde que unas 19.000 personas habían abandonado Yellowknife en menos de 48 horas: unas 15.000 en convoys de vehículos y unas 3.800 en vuelos de emergencia.
Cundía el temor de que la única ruta de escape quedara cercenada en momentos en que quedan en el lugar unas 2.600 personas, entre ellas equipos de emergencia, bomberos, obreros de la compañía eléctrica y policías, además de residentes que se negaron a salir.