Crimen de Idaho: acusan al sospechoso Bryan Kohberger de cuatro cargos de asesinato y allanamiento de morada
El estudiante de la Universidad Estatal de Washington de 28 años también fue acusado de delito grave de robo
Un estudiante de criminología de 28 años fue acusado de cuatro cargos de asesinato en primer grado en relación con la masacre en noviembre de cuatro estudiantes de la Universidad de Idaho, que conmocionó y paralizó al país.
Detuvieron al sospechoso, Bryan Kohberger, a primera hora del viernes en Albrightsville (Pensilvania), a 2.500 millas (4.023 km) de la escena del crimen, según informó la policía el viernes en una rueda de prensa. Kohberger fue acusado de los cargos de asesinato y allanamiento de morada por los asesinatos del 13 de noviembre y compareció el viernes en la mañana ante un juez de Pensilvania, según informó el jefe del Departamento de Policía de Moscow, James Fry.
Según la página web de la Universidad Estatal de Washington, Kohberger es estudiante de doctorado en la facultad de justicia penal y criminología de Pullman (Washington).
Pullman está a unas 9 millas (15 km) al oeste de Moscow (Idaho), donde vivían los estudiantes.
El viernes, el jefe Fry dijo que la ley estatal le impide revelar qué había avisado a la policía de la detención de Kohberger hasta que el sospechoso hubiera sido extraditado a Idaho.
“Tenemos bajo custodia a un individuo que cometió estos horribles crímenes, y creo que la comunidad está a salvo”, declaró Fry.
Sin embargo, aún no se ha encontrado el arma homicida, y Fry instó a cualquier persona que conozca a Kohberger a que se ponga en contacto con las autoridades con cualquier tipo de información sobre el sospechoso. Antes del arresto, Fry dijo que el departamento había recibido más de 19.000 pistas y realizado 300 entrevistas.
“Estos asesinatos han sacudido a nuestra comunidad y ningún arresto podrá traer de vuelta a estos jóvenes estudiantes”, dijo.
Fry agregó que aún no habían encontrado el arma homicida, pero que habían localizado un Hyundai Elantra que había sido visto cerca de la casa de los estudiantes en la noche en que murieron.
“Tengan la seguridad de que el trabajo no está terminado, esto apenas comienza”.
Tras el hallazgo, el 13 de noviembre, de los cadáveres de Ethan Chapin (20 años), Kaylee Goncalves (21), Xana Kernodle (20) y Madison Mogen (21), las dudas se agudizaron durante casi siete semanas. Los cuatro estudiantes de la Universidad de Idaho fueron encontrados en una casa fuera del campus que las tres jóvenes compartían a unas cuantas manzanas del campus.
Durante las semanas siguientes, la policía solo ofreció escasos detalles, mientras los investigadores de Internet se apoderaban del caso y, en ocasiones, los familiares de las víctimas criticaron a las fuerzas del orden por la falta de información. La policía de Moscow, la policía estatal de Idaho y el FBI fueron algunos de los organismos que colaboraron para resolver los asesinatos.
Fry declaró el viernes que respalda “completamente la forma en que hemos llevado esta investigación… manteniendo la información pertinente a este caso en un estricto secreto. Queremos tener una situación en la que cuando esto vaya a juicio, no haya ninguna duda de que todo lo hicimos bien”.
Arrestaron a Kohberger la madrugada del viernes en Pensilvania, donde había estudiado antes de mudarse a Idaho. Según los registros escolares, obtuvo un título de artes asociado en el Northampton Community College de Albrighstville, Pensilvania, antes de graduarse en la Universidad DeSales en mayo con una maestría en justicia penal. El sospechoso de 6 pies (1,82 m) y 185 libras (84 kg) trabajó como oficial de seguridad a tiempo parcial en el Distrito Escolar de Pleasant Valley, que tiene registrada a su madre como paraprofesional, hasta al menos agosto de 2021, según los registros de la agenda escolar. Sus dos hermanas trabajan como terapeutas, una en Pensilvania y otra en Nueva Jersey.
The Independent se puso en contacto con miembros de la familia Kohberger.
Una de las parientes de la víctima, Cheryl Goncalves, dijo a The New York Post que la familia se sentía “aliviada”.
“Es lo que queríamos”, declaró Cheryl Goncalves, abuela de Kaylee. “Queríamos que lo atraparan y ahora queremos justicia”.
Kohberger tiene prevista otra comparecencia en Pensilvania el martes, dijo Fry, y añadió que el sospechoso podría elegir de manera voluntaria regresar a Idaho para enfrentarse a los cargos.
Traducción de Michelle Padilla