El Cártel de Sinaloa afirma haber “entregado” a los sospechosos del asesinato de los surfistas extranjeros
Un portavoz del Cártel afirma que sus jefes ayudaron a la policía a encontrar a los asesinos para evitar que las autoridades estatales relacionaran al Cártel de Sinaloa con los infames homicidios
El cártel de Sinaloa afirma haber “entregado” a los sospechosos del asesinato de tres turistas que fueron atacados durante una excursión de surf para evitar la “atención” de la policía.
Jack Carter Rhoad, ciudadano estadounidense (30 años), y sus amigos australianos Jake (30 años) y Callum Robinson (33 años), desaparecieron el 27 de abril cerca de la ciudad de Ensenada. La región costera de la península mexicana de Baja California está controlada por el Cártel de Sinaloa
La madre de los hermanos, Debra Robinson, declaró a 7News que Jake viajó desde Perth para unirse a su hermano para hacer un “viaje épico”. Por su parte, Carter Rhoad iba a casarse en agosto.
Una semana después de la desaparición de los turistas, hallaron sus cadáveres al fondo de un pozo. Las autoridades del estado de Baja California confirmaron que las tres víctimas recibieron una bala en la cabeza. El lunes, las autoridades confirmaron que los cadáveres de las víctimas fueron identificados por familiares que viajaron a México.
Ayer, el Cártel de Sinaloa rompió su silencio sobre el asesinato de los tres hombres.
Un portavoz del Cártel, una de las organizaciones de narcotraficantes más poderosas de la delincuencia organizada, declaró que el grupo había cooperado con la policía local para encontrar a los asesinos. En concreto, el objetivo era evitar que las autoridades relacionaran el crimen con el Cártel.
“Eran ladrones de poca monta que actuaban solos, pero los entregamos”, declaró el miembro del Cártel de Sinaloa al Daily Beast.
Según dicho portavoz, el grupo temió recibir “atención” de las autoridades tras enterarse de que la policía buscaba a los turistas desaparecidos, junto con los asesinos. Por lo tanto, el Cártel colaboró con la policía y buscaron ellos mismos a los delincuentes.
“Llamamos a las autoridades para avisarles dónde podían encontrarlos”, aclaró el individuo, cuya identidad se ha mantenido en secreto.
Han detenido a tres sospechosos; dos hombres y una mujer que tenía en su poder el teléfono de una de las víctimas.
Según alegan los fiscales, uno de los sospechosos, Jesús Gerardo, identificado únicamente por su nombre de pila de conformidad con la legislación mexicana, al parecer confesó a su novia: “Me ch**gué tres gringos”.
Al parecer, los tres amigos salieron de una zona remota al sur de Ensenada, en la que habían acampado la noche anterior a su desaparición. Se dirigían a un Airbnb que habían alquilado en Rosarito, cuando un grupo de ladrones los asaltó e intentó robar el vehículo.
Según la fiscal estatal María Andrade, se sospecha que los ladrones querían robar los neumáticos del vehículo y que mataron a los turistas durante el asalto.
Los hombres probablemente intentaron resistirse al robo, lo que desencadenó la violencia.
“Los turistas se negaron a entregar su camioneta e intentaron defenderse, pero los atracadores iban armados”, explicó la investigadora al citado medio.
“Cuando los delincuentes sacaron las armas, los tres [turistas] intentaron calmar los ánimos, pero ya era demasiado tarde; los golpearon a los tres y luego les dispararon en la cabeza”, explicó.
La policía encontró incendiadas las carpas y la camioneta de las víctimas más tarde al norte de Ensenada. Se supone que los agresores intentaron destruir las pruebas del delito.
Traducción de Anna McDonnell