Científicos redescubren especie de planta tropical que se creía extinta desde hace casi 40 años
Una pequeña expedición se encontró con una flor silvestre sudamericana después de partir en noviembre hacia Centinela Ridge en el oeste de Ecuador, informa Emily Atkinson
Los científicos dicen que redescubrieron una especie de planta tropical que se creía extinta desde hace casi 40 años.
Un equipo de investigadores emprendió una pequeña expedición en noviembre a Centinela Ridge en el oeste de Ecuador, famoso entre los biólogos por ser el hogar de una gran cantidad de especies raras.
Fueron en busca del Gasteranthus extintus de baja altitud, una flor silvestre sudamericana descubierta en la década de 1980, llamada así en la década de 2000 porque los científicos creían que se había extinguido ya que muchos de los bosques donde se encontraba se habían convertido en teca, cacao, o plantaciones de banano.
Para determinar si la especie en verdad estaba extinta, los botánicos Nigel Pitman y Dawson White del Field Museum de Chicago reunieron a un equipo internacional de científicos de plantas, incluidos varios botánicos ecuatorianos.
Tan pronto como aterrizaron en Centinela, los expertos se dividieron en tres grupos para recorrer los pocos parches de bosque restantes que habían mapeado antes mediante imágenes de satélite.
Entre ellos se encontraba el estudiante graduado Riley Fortier, a quien su asesor y profesor asociado de biología, Kenneth Feeley, animó a unirse a la búsqueda de Gasteranthus extintus.
“Casi de inmediato, dos de los equipos encontraron la planta creciendo a lo largo de los arroyos”, informó Fortier.
"Definitivamente estábamos emocionados de verla, y debido a lo brillantes que son las flores, una vez que supimos qué buscar, fueron fáciles de encontrar”.
Al tuitear una foto de su descubrimiento, Pitman dijo: “Y de repente ahí estaba. No se ha ido. No del todo extinta. Todavía viva y bien y capaz de llamar tu atención desde la mitad del bosque”
“El joven botánico de ojos agudos @JNicoZapataB la vio primero. Todos la clasificamos juntos. Y no hemos dejado de sonreír desde entonces”.
El equipo también encontró la distintiva planta que crecía fuera de Centinela Ridge, lo que reveló que no se limitaba a la pequeña área inicial.
“Este es un llamado al optimismo: muestra que algunas de estas especies que pensábamos que estaban extintas no lo están, y que estos pequeños parches de bosque que quedan pueden ayudar a salvar la diversidad de plantas y animales en esta área”, declaró Feeley, titular de la Cátedra Smathers de Biología de Árboles Tropicales de la Universidad y coautor del artículo.
“Algunas de estas especies han podido sobrevivir durante mucho tiempo, pero esa área aún pierde bosques a medida que continúan despejándola para tierras agrícolas, por lo que debemos salvar lo que tenemos ahora para evitar extinciones reales”.
Ecuador es considerado como uno de los países más diversos del mundo, hogar del 17 por ciento de las especies de aves del mundo y 16.000 plantas diferentes, según World Land Trust.
Centinela Ridge, ubicada en el noroeste de la nación, se encuentra justo al oeste de los Andes, entre la cordillera y la costa del Pacífico.
Su lejanía es quizás la razón por la que contiene cientos de especies tropicales endémicas.
Una colaboración en curso entre Feeley y Pitman facilitó el camino para el redescubrimiento de Gasteranthus extintos y la pareja trabaja hoy en día para comprender el riesgo de extinción de muchas especies de plantas tropicales.
Feeley, quien estudia los efectos del cambio climático en las comunidades de plantas y árboles tropicales, comentó que espera que esta expedición anime a otros a explorar los bosques restantes y descubrir qué otras especies tropicales pueden o no estar extintas hoy.
“Esto resalta un problema de los trópicos, que es que tenemos muy poca información; hasta que no vaya un equipo de los mejores botánicos a un lugar, nunca se sabrá qué hay en realidad allí”, aseveró.
“El hecho de que ni siquiera podamos estar seguros de si una especie está viva o extinta resalta que necesitamos más personas que busquen estas especies”.
Feeley y Pitman esperan que la expedición a Centinela Ridge no sea la última.
El equipo de botánicos ahora trabaja con organizaciones locales para proteger los dos parches restantes de bosque que existen en el área.
Fortier detalló que estos dos lugares representan solo 247 acres (100 hectáreas) de tierra, pero contienen una gran cantidad de especies de plantas raras, como Gasteranthus extintus, así como muchos insectos, aves y mamíferos.
Mientras estuvo allí, Fortier dijo que estaba contento de ver monos aulladores que habitan en los árboles.
“Estos bosques podrían talarse en cualquier momento, por lo que queremos presionar para protegerlos”, expuso.
Como parte de la solución, los grupos conservacionistas o el gobierno ecuatoriano deben comprar la tierra entre estos bosques y conectarlos mediante esfuerzos de restauración, agregó Feeley. También se necesitan fondos y recursos adicionales para que los científicos puedan estudiar las numerosas especies tropicales de la región y ayudar a protegerlas de la extinción.
“Cuando los botánicos recolectaron plantas allí por primera vez, notaron la inmensa biodiversidad de la región, pero antes de que pudieran hacer algo al respecto, regresaron y estaban muy alarmados por la deforestación”, contó Feeley. “Por desgracia, la deforestación puede ocurrir más rápido que la ciencia”.
Tanto Feeley como Fortier destacaron la importancia de conservar esta diversidad para ayudar a contrarrestar los efectos del cambio climático.
“Preservar la biodiversidad, sobre todo la biodiversidad local, es más que solo plantas y animales. También se preserva el ciclo del agua, nuestra comida y mucho más”, añadió Fortier. “Estamos asegurando una vida más fácil para la humanidad a largo plazo”.