El rover de la NASA detecta una extraña formación rocosa que parece una “puerta alienígena” en Marte
La extraña formación rocosa puede ser el resultado de una fractura por tensión natural, probablemente debido a actividades sísmicas
El rover Curiosity de la NASA capturó una extraña imagen de una formación rocosa en Marte que parece una entrada perfectamente tallada en el Planeta Rojo, lo que generó teorías de conspiración sobre alienígenas.
Si bien la NASA aún no ha comentado sobre la imagen tomada por la cámara de mástil del rover (Mastcam), la extraña formación rocosa podría ser el resultado de una fractura por estrés natural, probablemente debido a actividades sísmicas.
Las grabaciones realizadas por el módulo de aterrizaje Insight de la NASA han demostrado que en el Planeta Rojo ocurren temblores, y recientemente se detectó el terremoto en Marte más grande jamás observado en el planeta.
Sin embargo, los investigadores todavía están trabajando para determinar cómo surgen y se propagan exactamente los terremotos en Marte.
La formación rocosa en forma de puerta, detectada por Curiosity en la característica geológica conocida como frontón de Greenheugh, también puede haber surgido de tales temblores.
La formación rocosa fue detectada cuando el rover ascendía al monte Sharp, que se eleva unos 5,5 kilómetros sobre el suelo del cráter Gale, donde Curiosity aterrizó en agosto de 2012.
Mientras Curiosity avanzaba por el terreno, los ingenieros de la misión observaron en marzo que el camino por delante estaba alfombrado con rocas de arenisca dura afilada por el viento, que dijeron que podría aumentar el desgaste de las ruedas del rover.
Planean evitar esas rutas, apodadas como terrenos de “espalda de caimán” debido a su apariencia de escamas.
“Era obvio a partir de las fotos de Curiosity que esto no sería bueno para nuestras ruedas. Sería lento y no habríamos podido implementar las mejores prácticas de conducción del rover”, dijo el mes pasado la gerente del proyecto Curiosity, Megan Lin, del Laboratorio de Propulsión a Chorro de la NASA en los EE.UU.
Esta tampoco es la primera vez que se observan formaciones rocosas tan extrañas en el sistema solar.
El año pasado, el rover Yutu 2 de China detectó una extraña formación en forma de cubo en la luna que parecía inusualmente simétrica con una parte superior plana.
Los investigadores del programa de divulgación Our Space de la CNSA bromearon diciendo que podría ser una cabaña alienígena.
Luego, cuando el rover se acercó a la estructura a principios de este año, nuevas imágenes revelaron que el objeto es en realidad una pequeña roca grumosa que se encuentra en el borde de un cráter.
El equipo de Yutu 2 apodó a la roca “conejo de jade” por su forma.
Muchos atribuyen explicaciones de otro mundo a tales formaciones rocosas, pero Michael Shermer, historiador estadounidense de la ciencia y editor fundador de la revista Skeptic, llama a este comportamiento “apofenia”, o la tendencia a encontrar patrones significativos en elementos sin sentido.