Millones de vacunas de COVID podrían desperdiciarse a medida que los estados las almacenan

Los excedentes estatales de la vacuna covid podrían desperdiciarse, ya que la oferta supera la demanda en todo el país.

Millones de dosis están a punto de caducar este verano, según los funcionarios de salud pública que hablaron con STAT. Según los funcionarios, los departamentos de salud estatales han estado instando al gobierno federal a dar las vacunas excedentes a otros países que tienen menos acceso -o ninguno- a las inyecciones.

A pesar de sus ruegos, los funcionarios federales han rechazado en gran medida las solicitudes alegando que las cuestiones logísticas y legales implicadas serían demasiado difíciles de resolver.

Una parte del despilfarro podría mitigarse si las autoridades sanitarias de EE.UU. ampliaran la vida útil aceptable de la vacuna de Pfizer, pero incluso con una prórroga las dosis acabarán caducando si no se utilizan.

Se espera que una gran parte de las dosis de Pfizer caduquen en agosto y, según el ritmo actual de vacunación, no es probable que se utilicen antes de que deban desecharse.

Marcus Plesica, jefe médico de la Asociación de Funcionarios de Salud Estatales y Territoriales, dijo a STAT que la demanda de la vacuna estaba disminuyendo en todo el país.

“No es que, si Connecticut no necesita la suya, pueda ir a Alabama. Simplemente no hay demanda”, aseguró.

Según datos del gobierno federal, los estados han recibido 52.36 millones de dosis más de las que han podido distribuir. Parte de esa disparidad es el resultado de errores de información o retrasos, así como del despilfarro, y esas cifras no tienen en cuenta las vacunas que están programadas para ser administradas como segundas dosis para aquellos que están esperando a recibir su última inyección.

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Se espera que casi un millón de dosis de Carolina del Norte caduquen durante el verano, y cientos de miles más llegarán al final de su vida útil en otoño. En Delaware, 25 mil 768 dosis caducarán en agosto, y en Colorado otras 352 mil 533 dosis se estropearán a finales del verano.

El excedente no es sólo un problema de los estados; el gobierno federal tiene su propio excedente creciente. Estados Unidos compró mil 410 millones de dosis, pero sólo ha distribuido aproximadamente 390 millones, lo que le deja un excedente de 20 millones de dosis. Esta cifra no hará más que aumentar, ya que el país espera recibir otros 562 millones de dosis de Moderna, Pfizer y Johnson & Johnson a finales de este año.

El mes pasado, el gobierno de EE.UU. afirmó que planeaba donar 80 millones de dosis, y que compraría otros 500 millones de dosis para países de ingresos bajos y medios.

Las vacunas estadounidenses son especialmente solicitadas por otros países porque están listas para su uso y pueden administrarse rápidamente a una población.