Presidenta de la Comisión Europea abandona cumbre de la UE y va a cuarentena
Ursula von der Leyen informó que ella dio negativo por coronavirus, pero “como precaución” inició la cuarentana.
La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, se vio obligada este jueves a abandonar una cumbre de la Unión Europea que había iniciado recientemente, luego de que un integrante de su personal cercano dio positivo en COVID-19.
Von der Leyen informó que ella ha dado negativo, pero que “como precaución estoy abandonando de inmediato el Consejo Europeo para iniciar un autoaislamiento”.
La funcionaria ya había socializado con otros líderes de la UE antes de la inauguración formal de la cumbre de dos días. Los organizadores habían tomado medidas especiales de precaución a fin de mantener alejados a los asistentes entre sí y asegurarse de que todas las regulaciones de salud fueran respetadas.
Pese al creciente número de contagios en las 27 naciones que conforman el bloque, los líderes de la UE decidieron realizar la cumbre en persona bajo el argumento de que las videoconferencias son insuficientes y que es necesario tener intercambios diplomáticos presenciales.
Sin embargo, no todos estuvieron de acuerdo.
“Esta cumbre debería realizarse como videoconferencia. Yo propuse en varias ocasiones sostener videoconferencias en lugar de reunirnos en persona”, dijo la primera ministra danesa Mette Frederiksen a periodistas connacionales a su llegada a Bruselas.
Las declaraciones de Frederiksen causaron sorpresa dado que varios líderes se habían quejado previamente sobre la realización de videoconferencias cuando los confinamientos generalizados en todo el bloque fueron implementados en el punto más alto de la epidemia en marzo. Muchos de ellos lamentaron la falta de privacidad durante las negociaciones por video y se mostraron contentos por reunirse en julio para las discusiones sobre el presupuesto del bloque a largo plazo.
Dado que no se espera que haya avances decisivos durante el encuentro de dos días, Frederiksen quizá pensó que un viaje corto a Bruselas no valía el riesgo en medio de un repunte de contagios en toda Europa.
“Hay algunas discusiones en las que es necesario estar un poco más cerca unos de otros. Pero hay otras reuniones que pueden hacerse a través de una videoconferencia”, afirmó.