Cómo una conferencia de prensa de Trump cambió para siempre a Four Seasons Total Landscaping
En el primer aniversario de la conferencia de prensa en Four Seasons Total Landscaping, Richard Hall vuelve a visitar la empresa familiar para escuchar cómo sus vidas se volvieron patas arriba
Para la mayor parte de Estados Unidos, comenzó con un tweet. Mientras el destino de la nación estaba en juego, el anuncio de Donald Trump de una conferencia de prensa en una compañía de jardinería en Filadelfia, donde su equipo prometió revelar evidencia de fraude electoral masivo, desencadenó una serie de eventos que culminó en un final peliculesco de su mandato presidencial en un estacionamiento, al lado de una líbrería para adultos.
Pero para el personal de Four Seasons Total Landscaping, la saga comenzó horas antes con una llamada telefónica de parte de alguien de la campaña de Trump.
“Recibimos la llamada a las 8:30 am”, dice Michael Sivaro, el gerente de operaciones, sobre su primer contacto con el equipo del entonces presidente. “En una hora estábamos allí para encontrarnos las personas, y a las 10 de la mañana ya se habían decidido por nosotros”.
Marie Sivaro, madre de Michael y propietaria del negocio, no lo pensó dos veces.
“Dije ‘no creo que podamos decir que no a esto. Este es el presidente’”, le cuenta a The Independent en la oficina trasera de su edificio. “No estábamos interesados en la parte política. Simplemente estábamos cumpliendo con nuestro deber como ciudadanos”.
El resto es historia. Tan pronto como el ex abogado personal de Trump, Rudy Giuliani, comenzó un monólogo lleno de teoría conspiranoicas sobre un presunto fraude electoral en Pensilvania, los reporteros que estaban ante él comenzaron a irse. La elección había sido dada a Joe Biden.
Ha pasado un año desde ese día, y un misterio que ha perdurado desde entonces es si el equipo de Trump realmente tenía la intención de celebrar su conferencia de prensa en este negocio familiar y no en el Four Seasons Hotel en el centro de la ciudad. Fue esa confusión y falta de certeza lo que hizo pasar los eventos del día de un espectáculo secundario incómodo a un final cómico y como de circo del mandato de Trump, desde la Gran Mentira hasta la Gran Broma.
La familia Sivaro, que un día se despertó en el ojo de una tormenta mediática, observó la espiral de la broma, pero han sostenido que se eligió a su empresa por su ubicación.
“Los medios de comunicación nos ayudaron un poco al informar que no sabían si habían confundido el hotel Four Seasons con nosotros. Era como si la comedia se escribiera sola”, relata Michael.
Marie dice que el equipo de Trump eligió su negocio después de buscar lugares adecuados en Google Maps.
“Creemos que se les ocurrió la idea después de hacer una vista aérea”, comenta. “Si miras hacia afuera, no puedes ver aquí arriba. Entonces bloquearon la calle. Podrían haber llamado a otras 10 personas”.
Los Sivaros no han tenido mucho tiempo para pensar en los detalles, porque desde el momento en que Giuliani comenzó a hablar, sus vidas se volvieron patas arriba.
“Perdí la razón porque él comenzó a divagar y yo estaba como ‘oh, vaya, veo a la multitud formándose al frente. ¿Qué es esto?’”, narra Michael.
Inmediatamente se vieron obligados a convertirse en el centro de atención nacional. En el día de una elección histórica, con una participación récord que convirtió a Trump en presidente de un solo mandato, todo el mundo parecía hablar del Four Seasons Total Landscaping. La historia dio origen a mil memes y bromas que persistieron durante días.
Pero no todo el mundo estaba contento con ellos. Después de todo, fue un evento político y la política los encontró.
“Las primeras 24 horas fueron aterradoras”, menciona Michael. “La gente nos amenazaba y nos reprendía”.
Marie agrega: “De repente, la gente me enviaba correos electrónicos: ‘J*danse, que se joda Trump’. O sea, ni siquiera sabía que podías hacer letras tan grandes”.
“La gente se volvió loca. No sabes lo que va a hacer alguien. Otras personas dejaban flores afuera como si fuera un funeral por la muerte de Trump”.
Su primera preocupación fue la seguridad. Michael fue inmediatamente a comprar más cámaras para su casa y Marie se comunicó con la comisaría de la policía local para informarles lo que estaba sucediendo.
Pero luego las cosas empezaron a cambiar, en parte debido a cómo reaccionó el equipo ante la atención. Michael y el ex director de ventas, Sean Middleton, vieron una oportunidad en medio de la locura. Decidieron unirse a la broma y convirtieron las redes sociales de la compañía en máquinas productoras de memes.
“Simplemente intercambiábamos ideas entre nosotros. Nos las enviábamos el uno al otro. Si nos hacía reir, significaba que debíamos publicarlo”, dice Michael.
La atención del mundo también les abrió las puertas de una manera que ninguno de ellos hubiera esperado. De repente, se vieron inundados con miles de pedidos de sus camisetas de todas partes del mundo; en la primera semana vendieron 35.000. Todo el personal se involucró para empacar cajas, que se amontonaban sobre sus cabezas entre las cortadoras de césped en el garaje de la parte de atrás.
“Pasamos de hacer paisajismo y terminar como nuestra remoción de hojas a ser un negocio de productos de la noche a la mañana”, continúa Michael. “Y teníamos que convertirnos en profesionales en uno o dos días. No hubo tiempo para errores de ningún tipo”.
La mayor parte de ese dinero se destinó al pago de bonificaciones a los empleados, dice Marie. También usaron su nueva fama para organizar colectas de ropa y apoyar a un refugio de rehabilitación de alcoholismo cercano.
El teléfono sonó constantemente con ofertas: periódicos, revistas, programas de televisión, todos querían escuchar su versión de los hechos. Luego, en febrero de este año, su oferta más grande llegó cuando se le pidió a Marie que apareciera en un comercial del Super Bowl.
“Cuando la oportunidad llama a la puerta de tu garaje, la tomas”, dice en el ostentoso anuncio.
Y el domingo, un año después de que el circo de Trump llegara a la ciudad, se transmitirá un documental sobre el año pasado en MSNBC.
Hoy, el estacionamiento que Giuliani y su equipo hicieron famoso está otra vez lleno de equipos de jardinería. Una gran fila de jardineras se encuentra junto a las tristemente célebres puertas del garaje, que se convirtieron en un telón de fondo para tarjetas de Navidad, fondos de Zoom e innumerables burlas.
Mientras Marie y Michael hacen un recuento de los eventos del año pasado, se puede ver a tres turistas israelíes acercándose nerviosos a la puerta principal. La pareja sale para encontrarse con ellos y tomar fotografías, antes de entregarles camisetas de Four Seasons.
“Esto pasa seguido”, comenta Michael.
La experiencia ha sido un torbellino para todo el equipo, pero ha sido positiva para ellos. Marie, quien fundó Four Seasons Total Landscaping en 1992, menciona que la parte más valiosa de lo que pasó el último año fue el sentido de validación, de reconocimiento que obtuvo el negocio que construyó desde cero.
“Aparte de ganar un poco de dinero este año, no ha cambiado mi vida. Pero es casi como si me validaran por tener un negocio exitoso”, dice.
“Mis amigas y sus maridos me miraban como si tuviera un pequeño negocio de camiones y remolques, y nadie realmente sabía de nosotros. No sabían lo que hacíamos por la comunidad”.
Los primeros 20 años en el negocio, en una industria dominada por hombres, fueron una lucha para Marie. Le tomó mucho tiempo convertirlo en un éxito, mucho tiempo antes de que llegara Rudy Giuliani.
“Había días en los que tenía seis cheques de pago en mi cajón y le decía a la chica que estaba sentada al frente ‘¿puedo cobrar alguno de mis cheques?’ Nunca tuve una semana en la que mi gente no cobrara, pero no aceptaba un cheque”, cuenta. “Tenía mis días, me subí a la parte trasera de los camiones y cavé agujeros y cargué esparcidores de sal. Y me levantaba en medio de la noche en cada tormenta de nieve”.
Michael tomó las riendas de las operaciones diarias de manos de su madre poco antes de que comenzara la saga de la conferencia de prensa, dándole una especie de prueba de fuego.
Dice que quiere volver a la jardinería y hacer crecer el negocio.
“Quiero intentar crear tantos puestos de trabajo como pueda para la gente de Filadelfia y para la gente de esta industria. El paisajismo realmente no tiene una buena reputación en lo que respecta a sus prácticas laborales: no hay sindicato, la gente solía ganar el salario mínimo. Estoy tratando de llegar a un punto en el que el personal pueda apoyar a sus familias con este empleo”, dice.
Marie parece lista para entregar las riendas y agradece el espacio para dedicar menos tiempo a pensar en el trabajo.
“Soy la persona más bendecida”, dice. “Pero toda mi vida me perdí de mucho. Recuerdo que mis amigos iban a desfiles de moda y a eventos en Nueva York y yo decía: ‘No puedo ir, tengo que ir a casa y trabajar’”.
“Recuerdo haber besado a Michael a través de la ventana de mi auto después de que se fuera a un juego de béisbol. Miré por el retrovisor y lloré todo el camino de regreso a la tienda porque quería estar allí”, agrega.
“Si yo fuera un hombre en la misma posición, habría estado bien. Pero el hecho de ser una mujer, creo que estaban esperando el gran momento para que yo tuviera éxito. Y esto me dio la oportunidad de que todos se dieran cuenta de que tengo un negocio real y exitoso.
“Estoy feliz con el documental y espero que nos traiga más trabajo, y es agradable que la gente conozca tu historia, pero perdiéndome de todas esas cosas, tengo mucho tiempo que compensar”.