Continúa la violencia letal en Gaza pese a las esperanzas de tregua de los mediadores
Mientras los mediadores expresaban su optimismo ante un inminente acuerdo de alto el fuego, la violencia arreciaba el sábado en la Franja de Gaza, donde un ataque israelí mató a al menos 18 personas, todas de una misma familia.
El ataque se produjo días después de que el Ministerio de Salud gazatí, dirigido por Hamás, anunció que la cifra de fallecidos en el enclave en los 10 meses de guerra entre Israel y el grupo insurgente había superado la barrera de las 40.000 personas. Horas antes del operativo, mediadores de Estados Unidos, Egipto y Qatar concluyeron dos días de conversaciones sobre una tregua con un mensaje de esperanza para un posible acuerdo.
En un comunicado conjunto, los tres mediadores indicaron que se había presentado una propuesta para salvar las diferencias entre Israel y Hamás y que esperaban concretar los detalles de su aplicación la próxima semana en El Cairo.
Los esfuerzos de mediación no solo buscan garantizar la liberación de decenas de rehenes israelíes cautivos en Gaza y detener los combates que han arrasado el territorio, donde el personal médico y humanitario teme ahora un posible brote de polio. También buscan aplacar las tensiones regionales que amenazan con desembocar en una guerra más amplia ante el temor a que Irán y la milicia libanesa Hezbollah puedan atacar a Israel en respuesta al asesinato de altos cargos insurgentes.
El ataque registrado a primera hora de la mañana del sábado en Gaza alcanzó una vivienda y un almacén adyacente que servía de alojamiento a desplazados, en la entrada a la ciudad de Zawaida, según el hospital Mártires de Al-Aqsa, en Deir al-Balah, a donde fueron trasladadas las víctimas. Un reportero de The Associated Press en el centro contó los cuerpos a su llegada.
Entre los fallecidos había un mayorista identificado como Sami Jawad al-Ejlah, que se coordinaba con el ejército israelí para llevar carne y pescado a Gaza. Entre los muertos estaban sus dos esposas, 11 de sus hijos — con edades comprendidas entre los 2 y los 22 años —, la abuela de los niños y otros tres familiares, de acuerdo con un listado distribuido por el hospital.
“Era un hombre pacífico”, dijo Abu Ahmed, un vecino que sufrió heridas leves. En el momento del ataque, en la casa y el almacén había más de 40 civiles refugiados, agregó.
Imágenes de la AP mostraban a excavadoras retirando escombros del almacén, que sufrió daños graves, y camiones que, según Abu Ahmed, se utilizaban para llevar carne y pescado al enclave desde Israel.
El ejército israelí, que no suele comentar operaciones individuales, dijo que estaba revisando el reporte. Además, apuntó que seguía atacando a insurgentes en el centro de la Franja, incluyendo a uno que fue visto lanzando cohetes contra las tropas.
Por otra parte, el ejército ordenó una nueva evacuación masiva de zonas del centro de Gaza. En una publicación en la red social en X, el vocero militar Avichay Adraee dijo que los palestinos que estaban en el campo de refugiados urbano de Maghazi y en sus inmediaciones debían abandonar la zona. Las tropas israelíes actuarán en esos puntos en respuesta al lanzamiento de proyectiles, añadió.
La inmensa mayoría de la población gazatí se ha visto desplazada por los combates, a menudo en varias ocasiones, y el ejército ha ordenado la evacuación de alrededor del 84% del territorio, según Naciones Unidas.
La guerra comenzó tras la incursión insurgente en el sur de Israel, dirigida por Hamás, el 7 de octubre, en la que murieron unas 1.200 personas, en su mayoría civiles, y otras 250 fueron tomadas como rehenes. Más de un centenar fueron liberados durante una tregua temporal en noviembre, y se cree que en Gaza habría aún unas 110, aunque las autoridades israelíes creen que alrededor de un tercio han muerto.
Israel afirma haber matado a más de 17.000 combatientes de Hamás, pero no ha aportado pruebas.
Los mediadores llevan meses intentando cerrar un plan en tres fases por el que Hamás liberaría a los demás rehenes a cambio de un alto el fuego duradero, de la retirada de las fuerzas israelíes de Gaza y de la liberación de palestinos encarcelados por Israel.
Israel y Hezbollah libran sus propias escaramuzas en su frontera desde el inicio de la guerra. Un ataque israelí mató el sábado a al menos 10 ciudadanos sirios en el sur de Líbano, incluyendo una mujer y sus dos hijos, de acuerdo con el Ministerio de Salud del país. Israel dijo que atacó un depósito de armas de la milicia.
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Magdy informó desde El Cairo, Egipto.