‘Venados zombis’: primer caso confirmado en el Parque Nacional de Yellowstone
La enfermedad, que afecta el sistema nervioso de los animales, se extiende rápidamente a lo largo de los EE. UU.
El martes, se confirmó el primer caso de “venado zombi” en el Parque Nacional de Yellowstone, una horrible enfermedad que destruye gradualmente el organismo de dichos animales.
El Servicio de Parques Nacionales confirmó el caso en un comunicado de prensa y manifestó que no hay mucho que puedan hacer en este momento, además de monitorear e investigar la presencia de la enfermedad, cuyo nombre formal es “caquexia crónica” (CWD).
De acuerdo con las estimaciones, entre el 10 % y el 15 % de los venados bura cerca de Cody (Wyoming) que emigran al sureste de Yellowstone durante el verano tienen la enfermedad. Hasta noviembre de este año, se informaron casos en 31 estados a lo largo de los EE. UU.
Según los CDC (Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades), los venados pueden tardar más de un año en presentar síntomas. Suelen perder peso drásticamente, se tambalean y pierden toda su energía, por lo que en la jerga se los denomina “venados zombis”.
La enfermedad se debe a la presencia de priones, es decir, proteínas infecciosas que destruyen lentamente el cerebro y el sistema nervioso de los animales, hasta causarles la muerte.
La caquexia crónica, que se propaga a través de fluidos corporales como las heces, la saliva, la sangre o la orina, en este momento, no tiene tratamiento ni vacuna.
Según los CDC, también se han registrado casos en tres provincias de Canadá, en renos o alces de Noruega, Finlandia y Suecia, y en un pequeño número de casos importados en Corea del Sur. La enfermedad también se detectó en venados y alces de granja.
Por otra parte, si bien aseguran que no hay registro de casos en seres humanos, puede afectar a otros animales que entren en contacto con los venados infectados, por ejemplo, a los monos. No obstante, se están llevando a cabo estudios adicionales para determinar si las enfermedades priónicas podrían afectar a personas que estén en contacto con carne de venado o alce.
La enfermedad se registró por primera vez en un centro de investigación de Colorado a finales de la década de 1960, después de que un venado en cautiverio presentara síntomas; el primer informe de un espécimen en estado salvaje con la enfermedad fue en 1981.
Los CDC recomiendan a quienes se dediquen a la caza o entren en contacto con venados o alces llevar ropa protectora, mantenerse lejos de animales que parezcan enfermos, minimizar la manipulación de los órganos del animal y pensar seriamente en la posibilidad de someter la carne a pruebas de detección de caquexia crónica antes de consumirla.
Traducción de Noelia Hubert