Gobierno de Jamaica niega secuestro de ciudadana estadounidense que dio positivo a COVID-19

Las autoridades jamaiquinas han disputado las afirmaciones de que una turista estadounidense fue secuestrada en Jamaica, a pesar de los llamados para rescatarla que circulan en línea.

Kalina Collier, asistente de vuelo de JetBlue de Nueva York, viajó de vacaciones a la isla el 28 de enero.

Las autoridades dijeron que Collier fue puesta en una cuarentena de 14 días después de dar positivo por COVID a su llegada al país, de acuerdo con los protocolos de prevención de coronavirus del país.

The Jamaica Gleaner informó que Collier aseguró que la tenían como rehén. En un comunicado en su cuenta de Instagram el domingo, Collier reconoció que "hizo un en vivo y pidió ayuda". No está claro qué dijo en Instagram Live.

El hashtag #KalinaCollier había aparecido en las redes sociales en medio de rumores de que había sido secuestrada.

El sábado, la Policía de Jamaica visitó a Collier, que había estado publicando fotos de sus vacaciones en Instagram, en su hotel en la isla y determinó que no estaba en peligro.

En un comunicado, las fuerzas del orden escribieron: "La policía está aconsejando a los miembros del público que descarten como rumor la información que ha circulado a través de las redes sociales y otros medios de que la estadounidebse Kalina Collier fue secuestrada en Jamaica".

Los funcionarios describieron la información como "infundada y maliciosa".

El comunicado continuó: “Ella permanece aislada y espera la autorización médica para poder viajar de regreso a casa. Mientras tanto, representantes del Ministerio de Salud, la Oficina de Turismo de Jamaica y la policía local se han puesto en contacto con su madre, quien posteriormente llegó a Jamaica”.

La policía señaló que “ella no está, ni estuvo en ningún momento, en peligro”, y mencionó que compartir información falsa puede constituir un delito según la ley.

Collier también escribió el domingo: “Nunca estuve perdida ni fui secuestrada”.

Sin embargo, acusó al personal del hotel de acosarla y verse obligada a quedarse en el resort a pesar de una prueba de COVID negativa.

"Después de mi prueba de COVID negativa, el hotel procedió a cubrir sus huellas una vez que se corrió la voz y me obligó a quedarme en el centro turístico durante el resto de mi cuarentena", escribió.

“Todos los días el hotel me acosaba para hacer una declaración, para salvarles la cara. Básicamente, hacer que parezca que todo lo que dije fue una mentira".

Se cree que Collier regresó a los Estados Unidos luego de su cuarentena de dos semanas.

El lunes, la embajada de Estados Unidos en Kingston tuiteó que tenía conocimiento de "una ciudadana estadounidense que había viajado recientemente a Jamaica y afirmó haber sido retenida contra su voluntad”.